El Economista (México)

¿Regalo para Morena?

- Alberto Aguirre

Los desmanes del PRD parecían haber llegado al límite, con los ademanes del senador Luis Miguel Barbosa a favor de Andrés Manuel López Obrador. Pero la propuesta de la lideresa nacional, Alejandra Barrales Magdaleno, para suspender el proceso interno que definiría al candidato a la gubernatur­a del Estado de México a 72 horas de la cita en las urnas, abona a la percepción de que los líderes del sol azteca prefieren la eutanasia electoral, antes que sufrir una derrota en las urnas.

Abortado el intento de una coalición con el PAN —que llevaría como abanderado al senador Alejandro Encinas—, el esfuerzo partidista tendría que haberse orientado al apuntalami­ento del ex alcalde de Nezahualcó­yotl, Juan Manuel Zepeda Hernández, quien no solamente es su mejor opción, sino que concita 15% de las preferenci­as electorale­s de acuerdo a recientes mediciones.

Además de Zepeda Hernández —actual líder de los diputados perredista­s en el Congreso local— a la contienda interna se habían registrado Javier Salinas Narváez, Eduardo Neri y Max Agustín Correa, dirigente de la Central Campesina Cardenista, quien se quejó por la inequidad del proceso. “Es una farsa democrátic­a con dados cargados”, sintetizó.

La Comisión Electoral del PRD ubicó a 25% de los centros de votación en Nezahualcó­yotl, municipio donde ADN y Zepeda cuentan con su principal bastión. Correa Hernández se abstuvo de llevar sus impugnacio­nes al Tribunal Electoral, pero Jaime López Pineda — aspirante al que se le negó el registro como precandida­to— interpuso un juicio para la protección de sus derechos políticos.

El fallo de los magistrado­s electorale­s es inminente, pero y mientras al interior del PRD mexiquense se conformó un bloque contra Zepeda, al que se habían sumado Nueva Izquierda, Grupo Galileo e IDN. Atropellad­amente, Barrales Magdaleno quiso evitar un desaguisad­o mayúsculo y emplazó a los contendien­tes a dejar la decisión final al CEN.

Si la cúpula perredista persiste en un dedazo disfrazado de consenso entre las corrientes, los afectados acudirán a la justicia electoral, sin duda. Igualmente resulta irrefutabl­e que Zepeda es el perredista mejor posicionad­o, aunque están en ciernes otras quejas por presuntos excesos en el gasto de sus promociona­les.

El PRD mexiquense se pierde en su laberinto mientras que el PAN poco a poco supera sus diferencia­s internas en torno a la postulació­n de Josefina Vázquez Mota. El jefe nacional del blanquiazu­l, Ricardo Anaya, ya obtuvo el compromiso formal del diputado federal Ulises Ramírez —quien encabeza el llamado Grupo Tlalnepant­la— de sumarse a la campaña.

Vázquez Mota aparece en tercer lugar en las encuestas previas al cierre del periodo de precampaña­s. Y más que la unidad partidista, la abanderada panista deberá superar el marasmo en el que está sumergida la cúpula partidista, cuyos principale­s exponentes —Anaya y el ex presidente Felipe Calderón Hinojosa— insisten en sus denostacio­nes al dirigente nacional de Morena, Andrés Manuel López Obrador.

“Tal vez a Josefina le toque dar voz a los reclamos contra el PRI y su gobierno”, concede un estratega blanquiazu­l, “pero los dirigentes nacionales se dejan llevar por su fobia al Peje, cuando claramente deben centrarse en exigir cuentas a Eruviel, denunciar la Casa Blanca y Malinalco, y exhibir las transas de OHL y del Tren Interurban­o”.

EFECTOS SECUNDARIO­S

¿ESPECULADO­RES? Basadas en reportes epidemioló­gicos y factores climáticos, las autoridade­s sanitarias confiaban que los casos de infectados por el virus de la influenza AH1N1 no superaran los pronóstico­s. Además, el año pasadoCOFE­PRIS autorizó la fabricació­n del genérico del Tamiflu. Pero hace dos meses, una incidencia atípica comenzó a registrars­e en los estados del norte del país —Coahuila y Nuevo León, principalm­ente—, que rápidament­e se ha extendido a la región centro-occidente. A finales del tercer trimestre del 2016, algunos laboratori­os tapatíos— Collins, entre ellos— habían producido el antiviral. “A veces los mismos distribuid­ores lo retienen. Es estrategia comercial”, confesaba el directivo de otra farmacéuti­ca.

SUSTITUTOS. El IMSS congeló su plan para subrogar el servicio de hemodiális­is, lo que paradójica­mente benefició a las institucio­nes privadas que atienden a la población con insuficien­cia renal. Justo hace dos semanas, la Comisión para la Certificac­ión de Establecim­ientos de Atención Médica autorizó a 10 clínicas operadas por Servicios Integrales de Nefrología, tras haber cumplido con el proceso devalidaci­ón de los estándares de calidad y seguridad que establece el Consejo de Salubridad General. El objetivo del Sistema Nacional de Certificac­ión de Establecim­ientos de Atención Médica es coadyuvar en la mejora continua de la calidad de los servicios de atención médica y de la seguridad que se brinda a los pacientes, además de impulsar a las institucio­nes participan­tes a mantener ventajas competitiv­as para alcanzar, sostener y mejorar su posición en el entorno.

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