Cambio de afore no debe limitarse: experto
EN EL PRIMER TRIMESTRE DEL AÑO, LA TASA DE TRASPASOS FUE DE 2.9% DEL TOTAL DE LAS CUENTAS
LOS PROBLEMAS de competencia entre las afores pueden dañar el patrimonio de los trabajadores y la reputación de todo el Sistema de Ahorro para el Retiro (SAR), alertó el académico del Centro de Investigación y Docencia Económicas (CIDE), Alexander Elbittar.
Indicó que la propia regulación limita la competencia entre las Administradoras de Fondos para el Retiro (Afores), como sucede con los recientes cambios a la Circular Úni- ca Operativa que buscan reducir el número de traspasos con el objetivo de proteger al trabajador (al aplicar nuevos requisitos para hace un cambio de una Afore a otra).
El profesor investigador de la División Económica y Coordinador del Programa Interdisciplinario de Regulación y Competencia Económica del CIDE consideró que, contrario al argumento de la autoridad regulatoria, no se puede limitar el cambio de trabajadores entre afores.
“El modo de promover la competencia en estos casos es con mayor información a los consumidores y creando mayores incentivos para la innovación y nuevos servicios, e incluso integrarlo a los servicios que otorgan los bancos y otros entes financieros”, dijo.
En el primer trimestre del 2017, la tasa de traspasos en México fue de 2.9% del total de las cuentas, mientras que en Chile es de 7.2% en promedio.
El académico consideró que el SAR tiene muy pocos años en México (este año cumplió su 20° aniversario), que necesita consolidarse y crecer al amparo de la competencia, por lo que cualquier medida en contra lo afectará fuertemente.
Elbittar comentó que problemas como las malas prácticas por parte de cuatro afores (XXI Banorte, Principal, Sura y Profuturo GNP), que fueron sancionadas por la Comisión Federal de Competencia (Cofece) por pactar convenios para reducir los traspasos de cuentas individuales, generan daños significativos en diferentes aspectos.
Por un lado, detalló, están las afectaciones relacionadas con la competencia económica que son: el daño al proceso de competencia y al patrimonio de los trabajadores; por otro lado, es el impacto al prestigio de todo el Sistema.
Agregó que es importante entender que la competencia, aunque implica riesgos, es buena, y se requieren incentivos que promuevan la innovación o la integración de servicios diferentes para atraer al usuario final y que haya un flujo positivo en el mercado.