BREES VENCIÓ AL DOLOR y también a los 32 equipos de la NFL
LA LEYENDA DE LOS NEW ORLEANS SAINTS SUPERÓ LA BARRERA DE LOS 500 PASES DE TOUCHDOWN EN SU VICTORIA ANTE BALTIMORE
EL HOMBRO inmóvil, la mueca de dolor y el camino lento para salir del campo.
Esa tarde de diciembre del 2005, la carrera de Drew Brees parecía que había terminado o, al menos, que la cambiaría para siempre. Nada más alejado de la verdad, pero no de una manera negativa, sino positiva.
La lesión del laubrum y manguito rotador de su hombro derecho podía acabar con su carrera, según los reportes médicos de la cadena ESPN. Por eso, los San Diego Chargers decidieron no renovar su contrato y liberarlo como agente libre.
No era la única franquicia que tenía desconfianza de su salud. Miami Dophins descartaron su contratación porque no confiaban en que se mantuviera sano. Pero un equipo que sí le tuvo confianza: New Orleans Saints.
Brees firmó con la organización para la temporada del 2006 y desde entonces cambió el rumbo de su carrera en la NFL y también el de la franquicia.
Fue fundamental para que la organización ganara su primer Super Bowl de la historia (2009), para que jugaran sus únicos dos juegos por el campeonato de la Conferencia Nacional (2006 y 2009) y para que cambiara su historial perdedor dese que se fundó en 1969.
En New Orleans, Brees se encargó de convertirse en una leyenda viviente. El pasado lunes 8 de octubre se convirtió en el quarterback que más yardas por recepciones ha conseguido en toda la historia de la Liga (72,103). Ésa marca era el anticipo de las otras que estaba por romper.
Ayer, cuando le ganó a Baltimore se convirtió en el tercer quarterback en la historia que vence a las 32 franquicias de la Liga. Antes, ese hito sólo lo habían podido hacer los legendarios Brett Favre y Peyton Manning.
Brees se dio tiempo para llegar a 501 pases de touchdown y convertirse en el cuarto jugador en la historia en superar la barrera de los 500 envíos a las diagonales. Se
encuentra 38 por debajo de Manning, siete de Favre y tres de Tom Brady. Parece que la marca es accesible para que la supere, si es que mantiene el ritmo y no se lesiona. La victoria de Brees y New Orleans fue en complicidad con Justin Tucker, el pateador de los Ravens. Tucker había anotado los 220 intentos de punto extra que tuvo en sus siete años en la NFL. Pero en el 221, cuando quedaban 24 segundos por jugar y Baltimore lo necesitaba para empatar el partido, falló la patada y permitió que los Saints se quedaran con el triunfo, que los coloca con marca de cinco victorias y una derrota, y que le permitió a Brees vencer a todas las franquicias de la Liga.
ADAM THIELEN vivió sus mejores años de su vida en Minnesota.
Nació en Detroit Lakes, un poblado al noroeste de la capital Minneapolis. Ahí conoció el futbol americano, disciplina que lo ayudaría a ganarse una beca en la Universidad Estatal de Minnesota y que después le dio una oportunidad para entrar en la NFL, con los Minnesota Vikings, el equipo del estado. Con esa escuadra también logró entrar en los récords. Se convirtió en el quinto jugador en la historia que registra siete partidos consecutivos en los que tiene 100 yardas por recepciones, luego de que obtuviera 110 ante los New York Jets.
Thielem igualó lo que hicieron Charley Henningan de los Houston Oilers (1961), Michael Irvin de los Dallas Cowboys (1995) y De
maryus Thomas con los Denver Broncos (2014) y sólo se encuentra por debajo de lo que hizo Calvin Johnson con los Detroit Lions en el 2012, cuando éste logró ocho partidos en fila con un centenar de yardas conseguidas por recepciones. La siguiente semana se enfrentará a la defensiva de New Orleans, que lo pudo neutralizar en los playoffs pasado. Pese a todo, el hijo de Minnesota mantiene los pies en el suelo.
“Las estadísticas no necesariamente dicen lo bueno que juegas”.