La próxima huida
El 29 de marzo pasado escribí sobre el narcofiscal. Hablo de Édgar Veytia, exfiscal general de Nayarit, detenido en San Diego, California, y acusado por autoridades estadounidenses de ser un narcotraficante a gran escala de metanfetaminas, heroína, cocaína y mariguana.
Dos semanas después di una conferencia en el Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey, campus Guadalajara, donde del público asistente casi 80 por ciento no tenía idea sobre la detención. Un hecho que debería de paralizar al país, había pasado desapercibido, al menos ante universitarios y académicos. Después, en reuniones familiares y con amigos descubrí que tampoco había tenido el impacto suficiente, “otro más” pensaron todos. Sin embargo, no lo es. Hablamos de la figura más importante en materia de seguridad en un estado. Para dimensionar su importancia una vez más, enlisto tres de sus atribuciones a nivel estatal según la Ley Orgánica de la Fiscalía General del Estado de Nayarit:
-Determinar la política institucional del Ministerio Público y los criterios y prioridades en la investigación de los hechos que la ley señala como delito y el ejercicio de la acción penal.
-Proponer al gobernador del estado los proyectos de leyes, reglamentos y decretos relacionados con la procuración de justicia.
-Participar en el Sistema Nacional de Seguridad Pública de conformidad con la ley de la materia y demás disposiciones aplicables, realizando las acciones siguientes:
a) En el ámbito de su competencia celebrar, promover, ejecutar y dar seguimiento a los acuerdos que se adopten en el marco del referido Sistema Nacional.
Poca cosa ¿no? Hoy toma relevancia nuevamente en la agenda nacional después de que la Procuraduría General de la República iniciara una carpeta de investigación en contra del gobernador de Nayarit, Roberto Sandoval. El mandatario en funciones es investigado por su probable comisión en el delito de enriquecimiento ilícito. La denuncia fue presentada por el diputado federal del PRD, Guadalupe Acosta Naranjo.
Hace un par de días entrevisté a Acosta Naranjo en el programa “La Nota Dura” de El Financierobloomberg y vale la pena rescatar un par de declaraciones en relación al exfiscal Veytia:
JR: ¿Cuál es la carrera política del gobernador Sandoval?
GAN: Él era alguien que se dedicaba a la compra-venta de ganado; luego fue diputado local, luego alcalde de la capital y ahí se encontró con su buen amigo Édgar Veytia, que hoy está detenido en Estados Unidos por delitos del narcotráfico. Era nada más y nada menos el fiscal general del gobierno del estado. Lo hizo primero director de tránsito, luego lo hizo director de la policía municipal.
JR: ¿Nadie sabía de este vínculo evidente entre el exfiscal y el crimen organizado?
GAN: Todos lo sabían, no fue mucha gente la que se animó a denunciarlo, en mi caso yo sí. Hay testimonios, videos, audios, mítines, cuando Édgar Veytia estaba en la plenitud del poder. De hecho lo hicimos ante las autoridades, alguna vez me tocó platicarlo con Chucho Murillo Karam, le dije que había muchos señalamientos de que en el gobierno del estado se estaban vinculando a la delincuencia organizada y que había que poner orden. Le dije que Édgar Veytia te recibía con la pistola en la mesa, porque él era el fiscal y te salía con la pistola y te la ponía en la mesa y no toda la gente se animaba a denunciarlo, algunos lo hicimos y fuimos perseguidos por un criminal […] El gobernador Roberto Sandoval protegió, defendió e hizo el verdadero poder tras el trono a Édgar Veytia. Diez años fue su funcionario, desde director de tránsito hasta fiscal, desde el municipio al gobierno del estado, y ahora nos dice que no sabía nada, nada sabía el pobre señor.
Dos declaraciones para subrayar la ignorada plática con el exprocurador general de la República, Jesús Murillo Karam. Seguro responderán: “eso no se platica, se denuncia”.
La década de cercanía laboral entre el gobernador en funciones y el narcofiscal apesta a complicidad, será la próxima huida. La única pregunta es si antes o después del 19 de septiembre, último día de su gobierno.