BATRES Y SALGADO SABÍAN DE DESAPARICIONES
Si se sabía del caso, dijo, ponían en riesgo la investigación y la vida de las víctimas
TANTO RIGOBERTO SALGADO, DELEGADO DE TLÁHUAC, COMO MARTÍ BATRES, PRESIDENTE DE MORENA EN LA CDMX, SABÍAN DESDE 2016 DE OPERACIONES ILEGALES QUE ORGANIZACIONES CRIMINALES TENÍAN CONTRA MOTOTAXISTAS EN LA DEMARCACIÓN. EL 6 DE AGOSTO DE 2016, PADRES DE FAMILIA IRRUMPIERON EN UN EVENTO DE MORENA PARA EXIGIRLE A BATRES LA APARICIÓN DE 64 JÓVENES.
Martí Batres, líder de Morena en la CDMX, recibió una carpeta con los casos
La casa donde los retenían está a dos cuadras y media de la sede delegacional
La presencia del crimen organizado en la delegación Tláhuac – cuyo líder, Felipe de Jesús Pérez Luna, El Ojos, fue abatido la semana pasada–, dejó al menos 68 desaparecidos de acuerdo con los habitantes, situación que mandó a silenciar el jefe delegacional Rigoberto Salgado.
De acuerdo con un audio en poder de El Financiero, Salgado pidió a los familiares de las víctimas que no manifestaran en público sus exigencias de una investigación para dar con su paradero, pues ponían en riesgo la vida de los desaparecidos.
“El pliego petitorio está hecho conforme a todas las manifestaciones que han hecho, incluso manifestaron que había desaparecidos; el día de mañana vamos a anotar los nombres”, les aseguró al concluir una reunión celebrada el 6 de agosto de 2016, en la explanada delegacional.
“A mí lo que me preocupa es que de una manera un tanto desesperada, pero irresponsable, estén manifestando cosas, porque incluso están poniendo en riesgo la integridad de la persona desaparecida”, añadió.
A DOS CUADRAS
Pocas horas antes, Aurelio Trejo, padre de Josué Rodrigo, un joven mototaxista de quince años que fue visto por última vez a sólo dos cuadras de la sede de la delegación, irrumpió en un mitin de Morena, al que se sumaron los padres de otros jóvenes desaparecidos o asesinados.
Según Trejo, en la manifestación pública, Salgado fue informado sobre la ola de violencia que sufría la demarcación. Pero fue Martí Batres, presidente de Morena en la Ciudad de México, quien recibió la carpeta de investigación por el secuestro de su hijo y el asesinato de un joven identificado como Ángel Giovanni.
Ambos casos están relacionados con una casa de seguridad instalada solamente a dos cuadras y media de la sede delegacional, donde era concentrados los mototaxistas secuestrados.
“No sé si el señor Martí Batres tapó al delegado Salgado, porque nosotros queríamos ver al delegado y el delegado nunca se apareció. Los que sí aparecieron fueron sus hermanos (aunque en el video sólo se ve a Raúl Salgado) y nunca nos dieron respuestas”, afirmó Trejo, quien no volvió a ser recibido por las autoridades delegacionales.
Otros testimonios recogidos por El Financiero, quienes solicitaron permanecer en el anonimato por temor a represalias, señalaron
“Me preocupa que de una manera un tanto desesperada, pero irresponsable, manifiesten cosas”
Rigoberto Salgado JEFE DELEGACIONAL EN TLÁHUAC
que el inmueble tiene tiempo de ser utilizado como casa de seguridad, de hecho en un cateo realizado encontraron identificaciones de algunos de los jóvenes secuestrados y restos de las unidades de mototaxis robadas.
Javier Cortés, compañero en la base de mototaxis de la que Josué Rodrigo fue levantado, denunció que un grupo de sujetos se hacían pasar por pasajeros y los llevaban a ese domicilio, donde eran retenidos.
Tanto la casa de seguridad, como los puntos de secuestro y donde fueron encontrados al menos dos cuerpos de los jóvenes, se ubican en un radio menor a los 500 metros del edificio delegacional.
Los padres de las víctimas aseguran que las grabaciones de las cámaras de seguridad instaladas por el Gobierno capitalino (C-4) fueron borradas justo en las horas exactas en las que se cometieron los crímenes.