Maduro, una vergüenza mundial, acusa Cordero
La situación de Venezuela generó reacciones divididas en el Senado. Mientras el PRI y el Verde respaldaron la decisión del gobierno federal de desconocer la Asamblea Constituyente que impulsó el presidente Nicolás Maduro, el PAN, en voz de Ernesto Cordero, llamó a tomar medidas más firmes “frente a la barbarie” y considerar romper relaciones. En contraste, la coordinadora del PRD, Dolores Padierna, exigió respetar la no intervención.
El panista Ernesto Cordero apuntó que Nicolás Maduro “es una vergüenza mundial, es una tristeza lo que le está sucediendo al pueblo venezolano, un pueblo que en algún momento fue la democracia más avanzada de América”.
Apuntó que “es un régimen de la edad de piedra lo que tiene Maduro en Venezuela, y México no puede avalar ni ser copartícipe de lo que
está sucediendo ahí, es verdaderamente una barbarie”.
El presidente del Senado, Pablo Escudero, apoyó la aplicación de las sanciones económicas correspondientes, conforme a las leyes y los convenios en la materia, y lamentó la violencia que se vive y la muerte de ciudadanos que reclaman sus libertades.
En nombre de la bancada del PRI, su vicecoordinador, Miguel Romo, consideró que “no es la intención del gobierno mexicano romper relaciones diplomáticas con Venezuela, pero sí es importante elevar la voz en los foros internacionales en el sentido de que se respete la libertad democrática”.
La coordinadora perredista, Dolores Padierna, apuntó que “México tiene que respetar la Constitución, que establece los principios de política exterior y uno de ellos es el de la no intervención en asuntos de otros países. Hay que respetar a los demás para que nos respeten a nosotros”.
Sobre la demanda del PAN para que México retire al embajador de nuestro país en ese país, comentó que “AN se está prestando a toda una ofensiva contra un gobierno de otro país y, justamente los senadores del PAN, son los menos autorizados para decidirlo”.