Harvey pone a Houston bajo el agua y lloverá más Trump viajará a la zona afectada hasta el martes, según informó la Casa Blanca
Los meteorólogos prevén que caigan 63 centímetros más de lluvia en cinco días
Houston, la principal ciudad de Texas y capital de la industria petrolera estadounidense, quedó ayer paralizada por las inundaciones, sin precedentes, causadas por la tormenta tropical Harvey, que han rebasado la capacidad de respuesta de autoridades locales y estatales, provocando al menos seis muertos y el cierre de dos aeropuertos.
En algunos sectores el agua llegó hasta los tejados de las casas, inundando carreteras y vecindarios completos. “Si está huyendo de una inundación, no se quede en el ático como último recurso. Si los pisos más altos de su edificio se vuelven peligrosos... suba al techo y llame al 911 para obtener ayuda”, señalaron los servicios de emergencia en un mensaje a la población.
“La situación es grave y va a empeorar”, advirtió a su vez el gobernador de Texas, Greg Abbott, asegurando que los daños ascienden a “miles de millones de dólares”.
Por su parte, la Casa Blanca anunció que será hasta mañana martes cuando el presidente Donald Trump visite Texas. El viaje fue anunciado luego de que el mandatario, que estuvo el fin de semana en la residencia de descanso presidencial de Camp David, discutiera vía telefónica con su gabinete la crisis desatada por Harvey en Texas.
Antes, Trump había anunciado a través de Twitter que quería asegurarse de que su visita no fuera una carga para las autoridades texanas en medio de la devastación que hasta la tarde de ayer sumaba al menos seis muertos.
Hobby International, uno de los dos aeropuertos de Houston, anunció la cancelación de todos los vuelos por “la abundancia de agua en las pistas”, mientras que el George Bush International operaba en forma limitada.
“Se están produciendo súbitas inundaciones, catastróficas, con amenaza de vida”, advirtió el Servicio meteorológico nacional (NWS) en Twitter. “Es una situación extremadamente peligrosa! No viaje a menos de que se le diga”.
La región de Houston/galveston fue una de las más golpeadas con más de 60 centímetros de lluvia, según el NWS quien estimó que las “inundaciones catastróficas van a empeorar y podrían ser históricas”, ya que entre 38 y 63 centímetros de lluvia caerán en la zona de aquí al jueves.
Harvey, el más potente huracán en azotar Estados Unidos desde 2005 y Texas desde 1961, fue degradado el sábado a tormenta tropical pero como su trayectoria es muy lenta (2 km/h) dejará caer mucha agua sobre una misma región por varios días. Tocó tierra el viernes como un huracán de categoría 4 -en una escala de 5-, pero sus vientos se había reducido ayer a unos 75 km/h.
Los guardacostas aseguraron, por su lado, haber recibido más de 300 llamadas en la región de Houston, ciudad en la que viven 2.3 millones de habitantes, a la que movilizaron cinco helicópteros.
En Port Aransas, una de las primeras ciudades azotadas por el huracán hubo barcos que volaron y terminaron estrellándose en algún edificio. En Victoria, un poblado al norte de Rockport, los habitantes quedaron impactados por la intensidad de la tormenta.
Otras 22 ciudades y condados de Texas recibieron órdenes obligatorias de evacuación, mientras tres mil miembros de la Guardia Nacional fueron activados para ayudar en las tareas de rescate en todo el Estado.