HAY MENOS VIVIENDAS ABANDONADAS
Un programa más agresivo de subastas y su mejoramiento apoyan esa reducción 63%
Un agresivo programa de subastas de parte del Infonavit hizo que el inventario de viviendas en esta condición registrara entre junio de 2015 y el mismo mes de este año, su nivel más bajo. Se trata de una reducción de 63 por ciento. Las empresas que más pujan por este negocio son Revimex y Provive, entre otras.
El inventario de vivienda abandonada del Infonavit registró en junio de 2017 su nivel más bajo en una década, reflejo de las campañas de mejoramiento de las unidades ubicadas junto a empresas y gobiernos locales, así como del agresivo programa de subastas a compañías interesadas en recolocar los ‘depas’ o casas en el mercado.
Entre las empresas que participan en las pujas de vivienda recuperada están Revimex, Provive, Axxiona y Quila.
Entre junio de 2015 y el mismo mes de 2017, el número de unidades abandonadas se redujo en más de 63 por ciento, a 73 mil 65 viviendas al cierre del sexto mes de este año, la cifra más baja del periodo 20072017, según información del Infonavit y de la Sociedad Hipotecaria Federal (SHF).
Además, se trata del número más bajo desde 2005 -año desde que se tiene registro-, cuando había casi 70 mil propiedades en esa condición.
Se trata de unidades que el Infonavit recupera luego de que sus dueños caen en impago y se marchan de los inmuebles, para luego realizar juicios en los que reclama las viviendas como garantía de sus créditos. Posteriormente, el Instituto lanza convocatorias de subasta en las que vende estas unidades a empresas interesadas.
Cabe mencionar que entre 2013 y 2014 hubo un aumento de más de 40 por ciento en el número de viviendas en esta situación, princi- palmente por la crisis que enfrentó el sector desde finales de 2012.
“El Infonavit ha sido agresivo en la recuperación de las viviendas, primero para hacer todo el proceso judicial y que las viviendas sean absorbidas por la cartera del Instituto; en muchos casos las casas se venden tal y como están, pero con un nivel de descuento (por parte de las empresas que las adquieren en las subastas), hay de todo tipo de vivienda, desde la que está deteriorada y vandalizada, hasta la que no tiene ningún problema”, explicó Claudia Velázquez, directora de operaciones Softec.
Según expertos, el precio de ese tipo de ‘depas’ o casas suele estar entre 5 y 30 por ciento por debajo del valor de las nuevas, aunque los compradores finales son responsables de pagar los daños que puedan tener los inmuebles.
“En lo que va del presente año se han desplazado más de 12 mil 500 viviendas recuperadas, a través de tres procesos de subastas y macrosubastas. En las dos primeras subastas participaron entre 80 y 90 empresas, pero al cabo de 11 procesos que se han realizado llegaron a estar presentes hasta 230 compañías, lo que representa un incremento de 145 por ciento (respecto a las primeras)”, respondió en una solicitud de información la subdirección de cartera del Infonavit.
Aunque el Infonavit lleva a cabo las subastas desde 2007, antes de 2014 el número de casas en esa condición que eran comercializadas se ubicaba debajo de las 10 mil por año.
En dichos programas, donde participan entidades como el Colegio de Ingenieros, gobiernos estatales -como el de Puebla- y la Fundación Hogares, se invierten cerca de 100 millones de pesos al año. EL MERCADO SECUNDARIO Provive es una empresa que en 2010 comenzó con la remodelación y venta de seis casas en Tijuana, seis años después -en el 2016- lo hizo con mil 700 unidades y una facturación de 290 millones de pesos.
Su modelo de negocio llamó la atención de fondos nacionales de venture capital como Ignia y Adobe Capital, quienes invirtieron en el emprendimiento 44 millones de pesos durante 2011 y 40 millones de pesos en 2015.
Según José Antonio Díaz, CEO y fundador de Provive, la empresa destina entre 30 mil y 50 mil pesos para la remodelación de una vivienda, que por lo general en el norte del país son abandonadas por inseguridad, falta de solvencia para pagar o por estar fuera de la mancha urbana.
Se trata de un proceso que en promedio dura 60 días, lapso en el que adquieren el inmueble a algún banco o al Infonavit, lo arreglan y lo colocan de nuevo en el mercado.
Estos inmuebles pueden ser adquiridos hasta 30 por ciento más baratos respecto a una casa nueva. Su precio promedio ya remodeladas, según Díaz, es de 270 mil pesos.
Diana Nava
Según cifras de la SHF, 10 municipios concentran el 33 por ciento de la vivienda abandonada que puede encontrarse en México.
Estas demarcaciones son: Ciudad Juárez en Chihuahua; Tijuana y Mexicali en Baja California; Tlajomulco de Zúñiga en Jalisco; Zumpango en el Estado de México; Reynosa y Altamira en Tamaulipas; Torreón en Coahuila; León en Guanajuato; y Juárez en Nuevo León.
“Para el cierre de 2016 se tenía planeado vender 30 mil viviendas en esa condición; sin embargo, ese número se duplicó y se recuperaron más de 2 mil millones de pesos, recursos que fueron reingresados a la Subcuenta de Vivienda de los Trabajadores”, detalló la dependencia que dirige David Penchyna.