“Nos engañaron”, dice el delegado
Un mal uso del suelo o la utilización de materiales deficientes son ejemplos de las irregularidades de algunos de los inmuebles siniestrados en la CDMX con el sismo del 19 de septiembre.
El jefe delegacional de la Benito Juárez, Christian von Roehrich, aceptó: “nos engañaron” algunas constructoras.
Por ello, dijo, pidió a la Contraloría interna investigar y determinar si hubo o no colusión con funcionarios públicos .
El edificio fue construido por la empresa Canada Buildings Group. El Financiero buscó a la compañía, sin embargo nunca respondió.
Francisco Murguía, director de MP Inmobiliaria, con 14 inmuebles en Benito Juárez y ninguno siniestrado, dijo que sí existe corrupción en el uso de suelo y de materiales, “por lo que se deben promover denuncias, porque esto afecta a todo el sector”.
Las inmobiliarias Dijon, Canada Building e Inmobiliaria Porta Tlalpan, cuyos edificios en la delegación Benito Juárez colapsaron tras el sismo de 7.1 grados del pasado 19 de septiembre, no sólo dañaron a los que compraron sus ‘depas’, con su caída amenazan con ‘cimbrar’ las operaciones y la reputación de las demás constructoras que operan en la demarcación.
Francisco Murguía, director General de MP Inmobiliaria, con un portafolio de 14 inmuebles entre desarrollados y vendidos en la demarcación, afirmó que las construcciones en la delegación están detenidas.
“De 1985 a la fecha se han construido en la Ciudad de México poco más de 7 mil inmuebles, es un hecho que no todas las empresas operamos de mala fe. Hay edificios que no sufrieron ninguna fisura”, afirmó.
Ayer el Jefe de Gobierno, Miguel Ángel Mancera, afirmó que se reactivarían las construcciones en las delegaciones Cuauhtémoc y Benito Juárez, con la condicionante de que tengan los dictámenes de no riesgo.
El Financiero buscó a Dijon, Canada Building e Inmobiliaria Portal Tlalpan, constructoras de tres edificios colapsados y ninguna
de las tres respondió.
En tanto Vertical Homes, comercializadora del edificio Insurgentes 1260, en la colonia Capultitlán, que sufrió severos daños con el sismo, sólo precisó que no construyó ese edificio, sino que sólo lo vendió, aunque declinó dar el nombre de la constructora.
El desarrollo de 12 pisos y 168 departamentos tenía apenas cuatro años de ser inaugurado y sus propiedades se vendieron entre 1 y 15 millones de pesos.
Ángel Alcántara