Auditoría especial a Juntos Podemos de JVM
La nueva ley de Fiscalización y Rendición de Cuentas de la Federación posibilita que los ciudadanos soliciten a la Auditoría Superior de la Federación el realizar investigaciones sobre algún asunto en el que se presuma manejo irregular de recursos públicos federales.
Mexicanos contra la Corrupción y la Impunidad (MCCI) utilizó esa figura legal para que la ASF se abocara a revisar el destino de los recursos que la Secretaría de Relaciones Exteriores destinó al programa Juntos Podemos, presidido de manera honoraria por Josefina Vázquez Mota, excandidata presidencial del Partido Acción Nacional.
Hoy hay varias cosas que reportar. Primera: que el 14 marzo de 2017 la ASF dio luz verde a esa solicitud y autorizó la revisión de las “erogaciones para la atención a comunidades mexicanas en el exterior y protección y asistencia consulares”, rubro del que, según fue revelado hace 13 meses en investigaciones periodísticas, salieron recursos del gobierno de Enrique Peña Nieto para dos organizaciones que desde Estados Unidos instrumentaron las actividades que llevaron la marca de Juntos Podemos.
Segunda cosa. Ya hay resultados parciales de esa auditoría solicitada por un ente ciudadano, la primera en su tipo.
La auditoría financiera y de cumplimiento (15-0-0510002-17001-DN-17) confirmó los hallazgos periodísticos de MCCI relativos a que en 2014 y en 2015 las asociaciones ligadas a Juntos Podemos gozaron de recursos por 3.7 millones de dólares y 26.8 millones de dólares, respectivamente. Un poco más de 477 millones de pesos al tipo de cambio de entonces. Y falta por auditar lo relativo a 2016, que es, para decirlo en términos redondos, al menos otro tanto de eso.
En las 94 páginas de ese reporte, que se puede consultar íntegro aquí (http://bit.ly/2zlkrmp), vienen detectadas las anomalías de varios programas, no sólo los ligados a JVM, del Instituto de los Mexicanos en el Exterior (IME), el organismo que fungió de alcahuete de los millonarios depósitos enviados a Juntos Podemos a través de la red de consulados de México en Estados Unidos.
Para distribuir los recursos a Juntos Podemos se utilizó, ha confirmado la ASF, la partida 44102 del IME, que debe usarse para traslado de mexicanos en el extranjero. Y a través de memorándums de entendimiento (MOU, por sus siglas en inglés) se radicaron en los consulados de Dallas, Texas, Chicago y Los Ángeles, además de la embajada misma en Estados Unidos, los 477 millones de pesos ya referidos para 2014 y 2015.
La ASF reporta que no hay claridad sobre cómo fue que se eligió a Juntos Podemos para beneficiarla con tantos recursos. Cuestionado al respecto, el IME respondió que invitó a 53 organizaciones a participar de esos apoyos, pero sólo eligieron a dos: sí, a los ligados a Juntos Podemos. La ASF no obtuvo explicación del IME sobre cómo fue que descartaron a los otros: “en ninguna parte del documento se menciona a las otras 51 organizaciones evaluadas y los criterios que no cumplieron”.
A final de cuentas, la ASF deja asentada la falta de debido seguimiento por parte de la SRE y el IME al destino de cientos de millones de pesos entregados a Juntos Podemos. No existe claridad alguna de si los mexicanos que se prometió apoyar vieron los beneficios pagados con esos recursos. Las organizaciones matrices se negaron a informar al respecto, amparadas en que son estadounidenses, prurito que no pusieron al recibir el dinero.
La Auditoría Superior de la Federación ha confirmado lo que hace un año descubrió el periodismo. Toca al Pri-gobierno, a Josefina y al PAN explicar a los contribuyentes las razones de tanta generosidad y, sobre todo, de tanto desorden.