Rusia paga caro por dopaje
El Comité Olímpico Internacional (COI) excluyó a Rusia de los Juegos Olímpicos de Invierno de Pyeongchang 2018 (9-25 de febrero) por el escándalo de dopaje de Estado que se realizó en el país de 2011 a 2015, el cual alcanzó su punto más alto en los Juegos Olímpicos de Sochi 2014. Sin embargo, los deportistas rusos podrán participar en las justas invernales con la bandera neutral, siempre y cuando una comisión organizada por el mismo organismo los autorice.
Valerie Fourneyron –ex ministra francesa de Deportes y Directora de la Autoridad de Control Antidopaje Internacional– fue nombrada titular de la comisión. Ella analizará uno por uno los casos de los deportistas rusos que deseen competir en la justa surcoreana, quienes tendrán que demostrar un historial limpio de dopaje y cumplir con los criterios de clasificación.
“Antes de Río 2016 no tuvimos tiempo para llevar a cabo un proceso justo. Ahora tenemos confirmación de cómo los rusos manipularon una instalación olímpica, el laboratorio antidopaje de Sochi y corrompieron la idea olímpica. Fue un ataque sin precedentes contra la integridad de los Juegos”, sostuvo Sebastian Bach, presidente del COI.
Por ello, el organismo informó que suspendió de por vida a Vitaly Mutko de la organización de los Juegos Olímpicos. El ex ministro de Deportes y actual viceprimer ministro fue una pieza clave para el sistema de dopaje, en el que se cambiaban las muestras de orina de los deportistas por unas limpias que estaban almacenadas en el laboratorio. Mutko también preside el Comité Organizador del Mundial de Rusia 2018.
El COI también informó que realizará 20 mil pruebas antidopaje antes de los Juegos de Pyeongchang 2018 para detectar a deportistas que se hayan dopado antes de la justa.
Redacción
AP