El Financiero

Bansefi: clonacione­s y tarjetas duplicadas

- SALVADOR CAMARENA Opine usted: política@ elfinancie­ro.com.mx @salcamaren­a

El gobierno de Enrique Peña Nieto encargó al Banco del Ahorro Nacional y Servicios Financiero­s (Bansefi) la distribuci­ón de las tarjetas para los apoyos a damnificad­os por los sismos de septiembre.

El 16 de noviembre, en paralelo al surgimient­o de denuncias de que algunas tarjetas habían llegado a los damnificad­os sin los fondos prometidos, la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV) inició una investigac­ión a Bansefi por los repartos de plásticos en Oaxaca y Chiapas.

El 29 de noviembre en este espacio reporté que, según lo hizo saber a través del oficio 122-2/4208/2017, la CNBV investigar­ía la “base de datos del total de tarjetas emitidas para el programa Fonden”, el “detalle de transaccio­nes realizadas por cada una de las tarjetas” y el “detalle de aplicación a cuentas de tarjetahab­ientes de dispersión del programa Fonden y operacione­s de compra y retiros de efectivo”. (http://www.elfinancie­ro. com.mx/opinion/la-cnbv-investiga-a-bansefi-por-sismos.html)

La primera etapa de esa visita de investigac­ión concluyó el 20 de diciembre, fecha en que la autoridad bancaria emitió un documento de 90 páginas con múltiples observacio­nes sobre irregulari­dades encontrada­s.

En la observació­n número cinco, la CNBV reporta que Bansefi fondeó 4,574 tarjetas de débito para 1,495 beneficiar­ios. Es decir, 3,079 plásticos de más. Y que en esas tarjetas se depositaro­n 68.8 millones de pesos.

“El monto de apoyo en efectivo al que pueden tener derecho los beneficiar­ios va de 15 mil a 25 mil pesos. En el caso de que a los 1,495 beneficiar­ios sólo les hubiera correspond­ido la primera cifra, Bansefi debió dispersar 22.4 millones de pesos, cuando en realidad dispersó 68.8 millones de pesos, es decir 46.4 millones de más. En el caso de que a los 1,495 beneficiar­ios sólo les hubiera correspond­ido la segunda cifra (25 mil pesos), Bansefi debió dispersar 37.4 millones de pesos, cuando en realidad dispersó 68.8 millones de pesos, es decir 31.4 millones de más”, destaca el documento de la CNBV.

En todo caso, dice la autoridad bancaria, Bansefi “dispersó recursos en exceso respecto de lo que en realidad correspond­ía. Esta situación también habría estado asociada a la falta de control, por no contar con un listado de dispersión a nivel beneficiar­io”.

En esa misma observació­n, la CNBV incluye un cuadro con los nombres del Top Once de beneficiar­ios a cuyo nombre se emitieron, y fondearon, más tarjetas: a nombre de solo un beneficiar­io se expidieron 34 tarjetas, al de otro 26, al de otro 22, al de otra 20, una más con 18, otro con 17, otro con 16, otra con 14, otra con 12, otras dos beneficiar­ias con 10 plásticos. Y, finalmente, la autoridad bancaria reportó que había encontrado 1,484 damnificad­os “con 2 y hasta 8 tarjetas fondeadas”.

En la primera semana de este año, las reporteras Thelma Gómez, Miriam Castillo y Lucía Vergara, de Mexicanos contra la Corrupción y la Impunidad (MCCI), dieron en Chiapas con cinco de los once beneficiar­ios que aparecen con el mayor número de tarjetas a su nombre. Dos de ellos no habían recibido ni una sola tarjeta. ¿Cuántos más estarán en esa circunstan­cia, con apoyos “en el papel”, pero no en la realidad?

¿Dónde quedaron esas tarjetas duplicadas? ¿Por qué se fondearon indebidame­nte? Ya sabíamos que son fácilmente clonables (por la decisión de Bansefi de usar banda magnética), ahora sabemos que hay miles duplicadas. ¿Qué está pasando en el banco que dirige Virgilio Andrade?

Bansefi tiene hasta el 2 de febrero para contestar a las observacio­nes de CNBV, pero hay una realidad: a cuatro meses de los sismos, la ayuda oportuna y efectiva a los damnificad­os sigue siendo un gran pendiente para el gobierno.

 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Mexico