AMLO buscaría ‘congelar’ a IP en energía, señala el WSJ
En un artículo, el diario afirma que el precandidato confunde al sector
El diario estadunidense Wall Street Journal explicó en un artículo que el candidato Andrés Manuel López Obrador busca “poner de cabeza” el recién abierto sector energético mexicano.
De acuerdo con el reportaje, firmado por el periodista Robbie Whelan, López Obrador, a quien señala con una amplia ventaja en las encuestas, ha confundido a los inversionistas en México al decir que congelará la inversión privada en exploración y producción de petróleo con “consecuencias dramáticas para la economía mexicana y las refinerías del Golfo de Estados Unidos”. Eventualmente, explica, López Obrador “quiere detener por completo las exportaciones de petróleo crudo una fuente primordial de ingresos para el país”.
En este sentido, el diario estadounidense entrevistó a la legisladora de Morena, Rocío Nahle, quien afirmó que “México se ha vuelto demasiado dependiente de Estados Unidos para obtener gasolina refinada”.
El año pasado, las importaciones de gasolinas alcanzaron el 71 por ciento del consumo nacional, de acuerdo con los indicadores de Pemex, quien sigue siendo el principal proveedor de los combustibles en el país, pese a la liberalización total de ese mercado. Contra un año atrás, en 2017 el promedio de importación creció 13 por ciento con 570 mil 100 barriles diarios.
Cabe recordar que Nahle, ingeniera petroquímica de profesión, fue designada por López Obrador
como la posible secretaria de Energía de llegar a la Presidencia. “Nosotros vamos a cambiar la política energética de este país, eso es un hecho”, agregó la legisladora al diario de Estados Unidos. Analistas de energía, políticos rivales y exempleados de Pemex explicaron al Wall Street Journal que el plan de López Obrador llevaría “a la dependiente economía energética mexicana a los inicios de 1970, antes de que hicieron los descubrimientos petroleros clave y cuando el país confiaba en una economía cerrada en industrias clave como la petrolera, de acero y la agrícola”.
Añade que “el plan de la refinería también podría tener amplias consecuencias fiscales para México, lo que conduciría a un potencial déficit presupuestario. Para Estados Unidos, que compra la mitad de las exportaciones de crudo de México, podría obligar a las refinerías a lo largo de la costa del golfo de Estados Unidos, que dependen del crudo mexicano, a buscar en otro lado”. Afirma el diario, que López Obrador tiene una larga historia de oposición a la apertura de la industria petrolera de México a la inversión extranjera y privada.
“En 2013, dirigió a miles de manifestantes a protestar contra el plan del Presidente Enrique Peña Nieto de permitir la inversión privada en la exploración y producción, calificando la idea de compartir los beneficios de los recursos naturales mexicanos con compañías petroleras extranjeras de una afrenta a la soberanía nacional”, recordó el autor en su texto.
En este sentido, retoma las declaraciones hechas por el candidato de “Juntos Haremos Historia” del pasado viernes donde dice que no hay razón por la cual no se produzca la gasolina en territorio mexicano.