Trump ahora va por migrantes ilegales a través del censo 2020
Por primera vez en más de 50 años, la encuesta incluiría la pregunta: ¿es usted ciudadano de Estados Unidos?
“Trump empuja una agenda racial y partidista que busca hacer invisible a los migrantes”
California lo demanda por la medida; NY encabezará coalición para frenarlo
Una nueva controversia estalló ayer tras la intención del gobierno de Donald Trump de incluir, por primera vez desde 1950, la pregunta ¿es usted ciudadano de Estados Unidos?, en la encuesta del censo para 2020, lo que se vio contestado inmediatamente en los tribunales por los estados del país con más indocumentados. California fue el primero en acudir a una corte federal para demandar a la administración en la Casa Blanca por lo que consideraron una medida “intimidante”. “La pregunta sobre la ciudadanía es el último intento del presidente Trump de avivar el fuego de la hostilidad antiinmigrante. Ahora, de una sola vez, el Departamento de Comercio ha ignorado sus propios protocolos y años de preparación en un esfuerzo concertado para suprimir un censo justo y preciso de nuestras diversas comunidades. La afirmación de la administración de que simplemente busca proteger los derechos de voto no sólo es risible, sino despreciable”, afirmó Alex Padilla, secretario de Estado de California. Nueva York, el segundo con más migrantes del país, anunció, seguido, que presentaría una denuncia firmada por varios Estados con el mismo objetivo de bloquear la pregunta.
La Casa Blanca defendió la propuesta de incluir la pregunta, al sostener que la información es necesaria para cumplir la ley que evita discriminar votantes. La vocera presidencial Sarah Sanders aseguró que la inclusión ha sido práctica rutinaria en el censo desde mediados del siglo pasado, y dijo que aunque Trump fue consultado, la decisión descansó enteramente en el secretario de Comercio, Wilbur Ross. Sin embargo, en un país con unos 11 millones de migrantes irregulares, la pregunta puede provocar la inhibición de muchas respuestas, incluso de los migrantes legales con dudas sobre la utilización de estos datos.
El temor se produce en el contexto de una ofensiva contra la migración irregular como no se había visto en décadas. Rompiendo con los criterios anteriores, el gobierno de Trump ha dejado claro que todos los migrantes indocumentados del país son objetivo de deportación, independientemente de si tienen antecedentes. También es política oficial reducir la migración legal. En este contexto, los migrantes tienden a evitar todo contacto con las Administraciones Públicas, como han denunciado los departamentos de policía de las grandes ciudades. “Se trata de otro asalto más a los migrantes, a los latinos y al censo 2020”, manifestó Arturo Vargas, director ejecutivo de la Asociación Nacional de Funcionarios Latinos Elegidos (NALEO). “Trump y los republicanos empujan una agenda racial y partidista que busca asustar y hacer invisibles a las comunidades migrantes”, criticó por su parte Tom Pérez, director del Comité Nacional Demócrata (DNC).
En el mismo sentido, el exfiscal general Eric Holder consideró que se trata de una “decisión irresponsable”.
También varios legisladores del Partido Demócrata presentaron en el Capitolio propuestas de ley para tratar de frenar al gobierno de Trump en la introducción de la pregunta. El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, conversó con sus homólogos de Francia y Alemania sobre la expulsión de decenas de diplomáticos del Kremlin, en represalia por el ataque en Londres con gas nervioso contra un exespía ruso, una decisión a la que ayer se sumaron Irlanda, Moldavia, Australia y la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN). Según la Casa Blanca, Emmanuel Macron, y Angela Merkel expresaron al republicano su apoyo a la fuerte respuesta de Occidente al ataque ruso con armas químicas en Salisbury, Reino Unido, incluida la expulsión de numerosos funcionarios de inteligencia del Kremlin en ambos lados del Atlántico.
En una rueda de prensa conjunta, celebrada en Bruselas, Macron y Merkel advirtieron a Moscú que habrá más medidas “coordinadas y proporcionadas” tras el envenenamiento de Serguei Skripal y su hija Yulia, que serán anunciadas “en los próximos días”. Además, la OTAN anunció que retirará la acreditación para siete miembros de la misión rusa en la Alianza y suspenderá las solicitudes de otros tres.
Mientras, Irlanda, Moldavia y Australia se sumaron a 22 países que han expulsado a diplomáticos rusos, en los últimos días. Trump conversó, además, con sus homólogos europeos sobre las medidas comerciales que ha anunciado contra China y que planea imponer aranceles por un valor de 60 mil millones de dólares a las importaciones de numerosos productos chinos, además de restringir las inversiones de ese país en Estados Unidos. Por su parte, el ministro de Asuntos Exteriores de Rusia, Serguei Lavrov, acusó a Washington de presionar y chantajear a otros países para unirse a la expulsión masiva de sus diplomáticos.