Andrés está herido
Tras el primer debate presidencial, todos los adversarios de Andrés Manuel López Obrador, olieron la sangre de un gladiador herido. No le fue bien en el debate, y para evitar una crisis, difundió dos videos para contestar las preguntas que evadió el domingo, y respondió las imputaciones que le hicieron todos los candidatos. La máxima de que quien está en la punta con una cómoda ventaja no discute con nadie, transformada en hay que rebatir todo para que esa ventaja no se evapore. López Obrador, quien aseguró haber ganado el debate, demostró con hechos que perdió esa primera confrontación entre pares.
Las encuestas telefónicas y los paneles que analizaron el comportamiento de los cinco candidatos el domingo, dieron como ganador al frentista Ricardo Anaya. Un ejercicio demoscópico de El Financiero, y cualitativos realizados por Reforma y
Efekto TV, mostraron una lucha cerrada, con Anaya arriba. La última medición dada a conocer, una encuesta telefónica de De las Heras Demotecnia, produjo la mayor diferencia de todos. Anaya obtuvo el 32% de la aprobación, nueve puntos por encima de López Obrador que sumó 23%, Jaime Rodríguez
El Bronco con 7%, José Antonio Meade con 5%, y Margarita Zavala con 3%. A la pregunta de quién fue “el peor candidato del debate”, uno de cada cuatro
spin
“El 84% del 86% que vio el debate, dijo al término que su intención de voto no había cambiado”
“AMLO está buscando atajar la vulnerabilidad por sus contradicciones e inconsistencias”