Ramón Vargas prepara temporada con Plácido
Además de celebrar sus 35 años de carrera en el Palacio de Bellas Artes, el 23 de junio, y en el Teatro Bicentenario de León, Guanajuato, en noviembre próximo, Ramón Vargas realizará una serie de presentaciones, de septiembre a octubre, en la Ópera Los Ángeles, al lado de Plácido Domingo. Compartirán escena en seis funciones de Don Carlo, de Giuseppe Verdi, bajo la batuta de James Conlon. En 2017 en Viena, ambos cantaron juntos ese título. Vargas en el rol de Don Carlo, y Domingo debutando en el papel de Rodrigo, que es una parte de barítono, registro en el que se ha encontrado cómodo con la edad.
“Cantar con Domingo es siempre un placer, oír la gran energía que tiene”, dice Vargas en entrevista desde la capital austriaca, donde reside y a donde llegó por consejo, precisamente, de su ahora coestelar, a quien conoció en 1982. “He cantado con él últimamente, en la celebración de sus 50 años de debut en el Liceu de Barcelona,
Simon Boccanegra (Verdi), y Don Carlo en abril del año pasado, por sus 50 años de debut en la Ópera Estatal de Viena”.
Verdi es el autor con el que Vargas dio el paso de una tesitura ligera a lírica, pero -destaca- continúa cantando a Mozart, como al principio.
“Es muy significativo que un cantante pueda seguir interpretando
un repertorio con el que empezó. Mozart es canto puro”, comenta quien ha abordado al compositor de Salzburgo desde el inicio de su trayectoria. En ese tiempo ha interpretado alrededor de 70 roles en obras que abarcan del barroco a la contemporaneidad. “Y siempre vuelvo a Mozart”, subraya. Ahora mismo participa con la Ópera des Nations de Ginebra en
Don Giovanni, como Don Ottavio, el primer papel mozartiano que cantó, en 1986. Posteriormente, comparte ofrecerá sus tradicionales conciertos de verano en Hungría y República Checa, y cerrará el año en la Ópera Estatal de Viena con Un baile de máscaras, de Verdi, y El murciélago, de Johann Strauss.
Ahora se alista para regresar a Bellas Artes, donde su ascenso comenzó con un Falstaff, de Verdi, en 1986. En su gala de aniversario estará acompañado por becarios del Estudio de Ópera de Bellas Artes -que fundó en 2014- y bajo la dirección de Srba Dinic. “Quiero celebrar en mi país estos 35 años de mucho trabajo y sacrificio, en los que lo más difícil ha sido permanecer”.