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- PABLO EMILIANO NAVA deportes@elfinancie­ro.com.mx Alfonso Mancilla

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Los Hazard son el primer par de hermanos que integran una Selección semifinali­sta en Copa del Mundo, desde que los gemelos Frank y Ronald De Boer llegaron con Holanda a esa instancia en Francia 1998. Aquella vez los futbolista­s surgidos del Ajax y luego contratado­s en paquete por el Barcelona no evitaron la eliminació­n de la Naranja Mecánica ante Brasil. Si Bélgica vence a Francia, Eden, del Chelsea, y Thorgan, del Borussia Mönchengla­dbach, serán los primeros hermanos que se clasifique­n a una final desde que lo hicieran los Förster, Karlheinz y Bernd, con Alemania Federal en España 1982. En la lista de goleadores históricos de la Selección de Francia, sólo hay tres nombres por delante del de Olivier Giroud: David Trezeguet, Michel Platini y Thierry Henry.

El delantero de 31 años, cuya ficha pertenece al Chelsea de la Premier League, vive en Rusia una dura paradoja, pues se encuentra al lado de su equipo a un triunfo de llegar a la final de la Copa del Mundo, pero hasta ahora no lleva goles anotados.

Consciente, quizás, de que la cuota goleadora y los reflectore­s recaen en sus ilustres compañeros de ataque, Antoine Griezmann y Kylian Mbappé, ha optado por En total, en los 21 Mundiales que se han disputado en la historia son 45 las parejas de hermanos las que han coincidido en un mismo Mundial, entre las cuales sólo dos han alzado la Copa del Mundo: los alemanes Ottmar y Fritz Walter en Suiza 1954, y los ingleses Bobby y Jackie Charlton en Inglaterra 1966. La dinastía Hazard es un caso singular. A diferencia de los casos habituales, tanto el padre, Thierry, como la madre, Carine, tuvieron carreras profesiona­les como futbolista­s antes de retirarse y dedicarse a ser maestros de gimnasia. No sólo por el talento de Eden, sin duda el más destacado de todos, el gen del futbol lo heredaron al doble y con fuerza. Y es que además de los mundialist­as Eden (27 años) y Thorgan (25 aportar una cuota de esfuerzo irreductib­le.

En los cinco partidos que lleva Francia en territorio ruso, acumula 380 minutos en el campo, en los que contabiliz­a 39.5 kilómetros recorridos: 16.1 con posesión del balón y 13.7 sin él.

A eso se agrega una asistencia para gol, con 77 intentos de pase, 55 de ellos efectivos.

Esta labor ha sido reconocida por el entrenador del equipo, Didier Deschamps, quien le refrendó su apoyo al delantero: “Él es importante en nuestro equipo y nuestro estilo de juego. En el partido [contra Argentina] hizo una asistencia para Mbappé y necesitamo­s este tipo de juego de apoyo. Él siempre ha tenido un papel importante para nosotros”.

El propio Giroud pone un ejemplo práctico a su situación: “Obvio que prefiero tener oportunida­des y anotar, pero si puedo dejar espacio para los demás, siempre trato de elegir la mejor opción para el equipo. Cuando Francia fue campeona en 1998, (Christophe) Dugarry anotó un gol y (Stéphane) Guivarc’h ninguno. Si somos campeones del mundo sin que yo anote, no me importa”, declaró Giroud.

Frente a Bélgica, buscará su primer tanto, pero su meta está enfocada en el objetivo primordial: que Francia alcance la final en Rusia.

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AP

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