CONCILIADOR

El nuevo entrenador de la Selección española, Luis Enrique, dijo que habrá “evolución, no revolución” en su etapa al mando, aunque también prometió muchas sorpresas para un equipo que viene de hacer un flojo papel en el Mundial. España obtuvo sólo una victoria en el certamen -contra Irán en la fase de grupos-, en el que fue eliminada por el local Rusia en octavos de final. “No habrá revolución. Habrá cambios (...) Hay que evolucionar. Es obligado”, mencionó el asturiano en su primera conferencia de prensa como técnico de España. “Vamos a seguir teniendo nuestro estilo, reforzándolo e intentando mejorarlo. Hay que defender mejor, hay que tener más profundidad y más ocasiones de gol, que es lo que han querido mis predecesores. Se debería parecer a un equipo”. Luis Enrique, que ganó dos ligas de España y una Champions League al mando del Barcelona entre 2014 y 2017, también insinuó que escogería a sus jugadores en función del estilo de juego en lugar de su reputación.

“Tengo ganas de dar mi primera lista. Habrá sorpresas, seguro. Es de 70 jugadores y ahí entran algunos que no han venido, otros que lo han hecho poco y los más habituales”, destacó. Una de sus primeras tareas será resolver el futuro en la Selección del defensor del Barcelona Gerard Piqué, quien declaró anteriormente su intención de retirarse de la tras la Copa del Mundo, pero no ha confirmado públicamente su posición desde entonces. “Es un caso diferente porque hace dos años dijo que lo dejaba. Me gustaría contar con todos y Piqué ya ha demostrado lo que es. Es un caso particular, diferente. Hay que respetar a los jugadores”, dijo el entrenador sobre el futbolista de 31 años.