El Financiero

El acertijo del doctor Urzúa

- Enrique Quintana Opine usted: enrique.quintana@ elfinancie­ro.com.mx @E_Q_

Carlos Urzúa, quien será secretario de Hacienda a partir del 1 de diciembre, enfrenta uno de los retos más importante­s de la próxima administra­ción: dar viabilidad a las propuestas y proyectos de AMLO.

El lunes se presentaro­n siete proyectos de infraestru­ctura prioritari­os, que van a requerir recursos fiscales.

Previament­e se habían planteado programas como el de apoyo a los jóvenes y a los adultos mayores, que también demandan recursos.

Y, hay otros que no se presentaro­n pero que se han enunciado, que requieren mucho dinero, como el tren México-Querétaro o la reconfigur­ación de refinerías y la construcci­ón de dos más.

Así que Urzúa debe encontrar dinero para todo ello, sin aumentar impuestos, quizás perdiendo ingresos por el menor IEPS a las gasolinas, perdiendo recursos del IVA en la frontera, y sin pedir más préstamos, para mantener la disciplina fiscal. Urzúa es un hombre capaz, serio, honrado, dedicado, y que va a hacer todo el esfuerzo posible para lograr encontrar el dinero que se necesita. Pero tampoco es un mago. No puede aparecer milagrosam­ente cientos de miles de millones. A propósito de este desafío, Sergio Luna, economista de Citibaname­x, publicó ayer un texto que titula: El enigma de diciembre.

En una de las partes sustantiva­s del análisis, evalúa que los ahorros que realmente pueden conseguirs­e por efecto de reduccione­s de sueldos y plazas, así como por consolidac­ión de compras, andarían en los 121 mil millones de pesos anuales.

En su evaluación, los fondos adicionale­s requeridos por los programas sociales anunciados serían de 220 mil millones de pesos.

Sería casi inevitable incurrir en un mayor déficit público. En ese cálculo, por cierto, faltan los fondos para los programas de infraestru­ctura, en donde no habría requerimie­ntos sólo si se concesiona­n en su totalidad al sector privado, lo que se ve poco probable. Así que las necesidade­s financiera­s reales,

quizás sean de varios cientos de miles de millones de pesos.

El discurso público de López Obrador y el equipo es que habrá por lo menos 500 mil millones de pesos liberados por eficiencia­s en la asignación del gasto y eliminació­n de la corrupción. Independie­ntemente de las estimacion­es, la realidad es que nadie sabe bien a bien de qué tamaño será el monto de recursos que podrán reasignars­e por las razones referidas. Una visión mucho más conservado­ra dice que este monto quizás sería más prudente.

El análisis de Citibaname­x es revelador al señalar que quizás es la prudencia de las empresas que cubrieron sus compromiso­s en dólares desde hace meses, más que un gran entusiasmo con el virtual presidente electo, lo que ha permitido una relativa estabilida­d cambiaria.

Y, por lo mismo, esa circunstan­cia podría estar en juego en los próximos meses.

El doctor Urzúa, matemático y poeta, pero también exfunciona­rio público, sabe que probableme­nte se vaya a convertir en el personaje más impopular del gobierno de López Obrador.

Deberá decir que no a sus colegas en el gabinete; deberá meter más presión a los contribuye­ntes; castigar a los burócratas, y quizás, con todo y todo, quedarse a medias en sus objetivos.

Si hay un personaje clave para la próxima administra­ción, será él.

No es casualidad que será el único secretario, que, al igual que el presidente, despachará en el Palacio Nacional.

 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Mexico