‘Con la cabeza en las nubes’ las empresas se consolidarán
Hasta hace muy poco, la frase “estar en la nube” significaba dispersión. Hoy no lo vemos así, sobre todo cuando pensamos en el mundo de los negocios en donde la adopción de la informática en la nube es primordial.
Hoy tener la cabeza en las nubes es un factor crucial para las empresas que ven hacia el futuro: según la investigación de la consultora IDC, se espera, que tan solo en 2018, el mercado de la informática en la nube mueva mil 700 millones de dólares; y tenga un crecimiento esperado del 5.8 por ciento en el segmento de tecnología de la información, según lo pronosticado por la misma encuesta.
En el futuro, estar con la cabeza en la nube será la base, es decir, el terreno más firme posible para avanzar. Además, hay un aspecto inherente a la tecnología que tendrá un impacto especial en esto: la Inteligencia Artificial (IA).
Un estudio de Gartner señala que para 2021, casi la mitad de los equipos empresariales de Tecnología de la Información (TI), un área tradicionalmente formada por expertos en tecnología puramente técnicos, debería estar compuesta por una combinación de estos profesionales y otros con antecedentes comerciales, administrativos y creativos. Aunque se centra en un área específica, los datos muestran lo presente que está el tema de la colaboración en la agenda corporativa.
LATAM Airlines es un ejemplo de esto. La empresa migró a la nube sus aplicaciones dirigidas a la gestión de las rutinas administrativas, a fin de mantener la sinergia entre los más de 50 mil empleados que ahora tiene la empresa mientras se ejecutaba la fusión entre la empresa chilena LAN y la brasileña TAM. La solución permite la colaboración instantánea y convierte a cualquier documento en un espacio de trabajo conjunto. El éxito de esta experiencia ha llevado a la decisión de continuar con el traslado a la nube para cosechar otros beneficios de esta tecnología, como la capacidad de ofrecer ofertas personalizadas a los pasajeros.
AutoML, una herramienta de aprendizaje automático creada por Google, ya es usada por más de 18 mil compañías en todo el mundo. La mejor noticia de esta nueva ola es que no es necesario ser un experto en programación para usarla. El acceso a este tipo de tecnología de IA, combinado con otras ventajas de utilizar el poder de cómputo que vive en la nube, es un punto de inflexión para las empresas.
La colaboración se convierte en el nuevo estándar cuando alguien edita una hoja de cálculo en Nueva York mientras otro usuario trabaja en el documento desde una oficina en Sao Paulo a la vez que tiene una reunión virtual con un compañero al otro lado del mundo. Con la ventaja de administrar el servidor en el que se ejecuta todo esto, que por cierto también está en la nube.
No es posible medir hasta dónde podemos llegar en este campo. La única certeza es que nunca había sido tan seguro caminar por las nubes.