NO HABRÁ SUMISIÓN DEL LEGISLATIVO AL NUEVO GOBIERNO.
PORFIRIO MUÑOZ LEDO CELEBRA QUE “HEMOS VUELTO Y AHORA SÍ CON EL PODER PARA TRANSFORMAR AL PAÍS DE FONDO”. Pero aclara: “No se trata de imponer nada de arriba para abajo. En el Legislativo no habrá sumisión al Ejecutivo”.
El morenista, presidente de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados, indica que “pondremos orden en los Poderes públicos, pero con acuerdos, sin imposiciones de nadie”.
A sus 85 años de edad, uno de los políticos más completos y con la trayectoria política más amplia en la historia reciente del país –legislador, presidente de partidos, secretario de Estado, embajador, precandidato presidenciable, entre muchos otros– celebra que con el triunfo de Morena y Andrés Manuel López Obrador, en lo personal, “veré culminada una tarea y veré resultados de una lucha democrática de 30 años, para lo que estoy en pleno estado intelectual, físico y con energía para hacerlo”.
Recuerda que fue el primer senador de oposición que interpeló, en 1988, a un Presidente de la República –Miguel de la Madrid– en pleno Informe de Gobierno, y el que en 1997 encabezó la mayoría opositora que le arrebató al PRI el control político y económico de la Cámara de Diputados. “Recordemos que en 1988, por vez primera, ingresamos dos senadores de oposición a esa Cámara alta, desde entonces, el país ha venido reafirmando lo que entonces dijimos. Muchas de las iniciativas que entonces presentamos, que fueron derrotadas por la mayoría compuesta por el antiguo régimen, siguen vigentes”, advierte.
Tiempo después, “las que depositamos, algunas con gran éxito, cuando en 1997 se estableció la primera mayoría de oposición en la Cámara de Diputados en toda la historia de México, que tuve el honor de ser designado presidente de esa Cámara”.
Sin embargo, Muñoz Ledo recuerda que “después vinieron días aciagos, de profundo retroceso, pero, ahora, hemos vuelto. Hemos vuelto con la determinación de realizar un profundo cambio histórico en el país. Su cuarta transformación”, sostiene.
Y hoy “creo estar con el pleno estado intelectual, y físicamente con la plena energía y constancia que me han caracterizado, para que podamos lograr todo aquello que planteamos y que no pudimos conquistar”, reitera el presidente de la Cámara de Diputados.
Plantea que “queremos practicar un bicameralismo respetuoso y ágil, que ordene la agenda legislativa y cada uno tenga la función que le corresponde en este proceso. Queremos, finalmente, que haya un parlamentarismo eficaz y ordenado. Son muchas las tareas que tenemos pendientes. Tenemos tres años para ello, después ya se verá si se convoca a un Constituyente o si se encuentra otro método para inaugurar la cuarta República Mexicana”.
“Para ello, hay que renovar el marco jurídico en profundidad. Aquí se crean y se da orden a los Poderes públicos. Es el órgano creador y ordenador del Estado. No habrá iniciativa que no recibamos.
“Éste va a ser un parlamento abierto, ya tuvimos la decisión y la experiencia fenomenal en el Constituyente de la Ciudad de México, de haber abierto las puertas a todos los grupos sociales y a sus organizaciones”, expone Muñoz Ledo.