“Aíslan” a Noroña tras pelea verbal con Muñoz Ledo
Porfirio Muñoz Ledo llegó al salón de sesiones de malas. Regañó en general a todos los legisladores porque, a las once de la mañana, hora de la cita para la sesión, había apenas 220 diputados de los 499. Les advirtió que para la próxima llegan en punto o suspende la sesión. Pero el diputado del PT, Santiago González Soto, de Nuevo León, lo paró en seco: “Señor presidente, y para que me vaya conociendo, quiero preguntarle: ¿en calidad de qué acudió usted el día de ayer a lo que el Presidente de la República le llamó el Informe de Gobierno? ¿En fundamento de qué acudió usted, si a título personal o como representante de esta Cámara?” Enrojecido de coraje, a gritos apenas audibles por la voz que se le fue, Muñoz Ledo reprochó: “No acepto ninguna censura, porque los actos públicos de las diputadas y los diputados son nuestra exclusiva responsabilidad ciudadana y política. Lo hice en mi calidad de diputado, de presidente de la Cámara de Diputados. Y me hizo favor de acompañarme el señor vicepresidente, Marco Adame, del PAN”. Al instante, Fernández Noroña aprovechó y a gritos pedía la palabra, que el presidente le rechazó. “¡No! ¿Para qué?”, repetía Muñoz Ledo. “¡Quítenle el micrófono!” El legislador por Iztapalapa pedía una “moción de orden” para el procedimiento de la sesión. “¡No procede la moción de orden porque no hay desorden, a no ser que usted quiera provocarlo, lo que no permitiré!”, respondió el presidente.
Y Porfirio fue el grano: “Y quiero decir que tanto el diputado Adame como yo fuimos agredidos físicamente por otro miembro de este Congreso, lo que es inaceptable. ¡Usted nos faltó ayer al respeto y tuvo agresión física!”
Ya de pie en su curul, Fernández Noroña reclamó: “¡Usted está mintiendo y exijo el uso de la palabra!” Pero el presidente, iracundo, remachó: “¡Usted es un golpeador! No acepto su provocación”.
“¡Y usted es un insolente, un autoritario que vuelve a los tiempos del PRI!”, le reviró Gerardo Fernández, quien subió hasta la tribuna y arrebató el micrófono a la diputada del PT, Ana Gabriela Guevara.
Y el presidente justificó: “Es la continuidad del orden republicano. Le ruego que tome su asiento. No es ilegal, ese es su juicio”. Para calmar los ánimos, Muñoz Ledo dijo: “Hay que tener tolerancia, hay que controlar la adrenalina”. Al final, Muñoz Ledo pidió a la asamblea, en votación económica, si le concede a Fernández la palabra. “Pido el voto a mano alzada. ¡Mayoría abrumadora (negativa) de la asamblea! ¡Sigamos la sesión!”
“¡Usted (Fernández Noroña) nos faltó ayer al respeto y tuvo agresión física!” PORFIRIO MUÑOZ LEDO Diputado de Morena “¡Y usted es un insolente, un autoritario que vuelve a los tiempos del PRI!” GERARDO FERNÁNDEZ NOROÑA Diputado de Morena