La “regla del 72” o en cuánto tiempo podría duplicar una inversión
Uno de los célebres consejos de Warren Buffett, quién forma parte de los inversionistas más exitosos de la historia, alude a la importancia de ahorrar. El oráculo de Omaha afirma que “no ahorres los recursos que te sobran después de gastar; gasta los recursos disponibles después de ahorrar”. Este sencillo consejo está sustentado en las poderosas implicaciones del beneficio de ahorrar e invertir lo más pronto posible para lograr una fuerte acumulación de recursos en el largo plazo. Para analizarlo, supongamos que queremos estimar el tiempo necesario para duplicar una inversión de $100,000 a una determinada tasa de rendimiento. Para aproximar esta cifra, consideremos que la ganancia anual promedio del mercado accionario mexicano, de acuerdo al Índice de Rendimiento Total de la BMV, fue de 17.1% entre 2003-2017. Con costos de transacción de 1% e impuestos sobre ganancias de 10% al año, un estimado crudo del rendimiento neto anual sería de 14.2%.
La “regla del 72” es un cálculo para contestar de manera aproximada preguntas de interés compuesto con rapidez: divida 72 entre el rendimiento de 14.2 (en por ciento) para obtener 5.1 años, tiempo requerido para duplicar su inversión (a $200,000, de acuerdo al ejemplo). Con esta cifra, puede estimar el tiempo para cuadriplicar el monto inicial. Asumiendo $200,000 como nueva inversión, pasarían otros 5.1 años (72/14.2) para alcanzar $400,000 en poco más de 10 años. Es importante decir que la regla requiere que no se retiren recursos en ningún momento y que el tiempo estimado es muy sensible al rendimiento asumido. Por ejemplo, si fuera 8.3% en vez de 14.2% (observado de 2009 a la fecha, tras la crisis), la inversión se duplicaría en 8.7 en vez de 5 años. Por último, el ejemplo no incorpora el impacto de la inflación, que reduciría la ganancia en términos de poder de compra.
Bajo la misma lógica y asumiendo 35 años de vida laboral, el monto de la inversión en este horizonte crecería a $1,600,000. Si la inversión inicial fuera $50,000 menor, los recursos al final del periodo serían alrededor de $800,000 más bajos. Este crecimiento exponencial es el sustento detrás del sabio consejo de Buffett de gastar únicamente los recursos disponibles después de ahorrar.