The Greatest Showman
No ocuparé este espacio para hablar de mis preferencias personales en las que definitivamente se encuentra la película
The Greatest Showman, protagonizada por Huge Jackman y en la que se cuenta una parte de la historia del autor, filántropo y hasta político Phineas Taylor Barnum, considerado también como uno de los empresarios más exitosos en el rubro del circense, donde era señalado por ofrecer espectáculos que rebasaban el límite de lo extraño para aterrizar en lo ridículo y la mentira. Aún así, sabiendo todos que lo que se ofrecía en su espectáculo era completamente falso, despertaba la necesaria inquietud como para pagar un boleto y ver de qué se trataba. Pero bueno, no se trata de contarles que la he visto 22 veces (no es broma), sino de tratar de generar alguna analogía con lo que estamos viviendo con la visita (que me queda claro será breve) de Diego Armando Maradona en nuestro futbol.
Y cabe porque coincidimos en que su llegada al futbol mexicano obedece a factores publicitarios y donde importa más la forma que el fondo; donde el golpe mediático tiene mayor sustancia que el proyecto, en otras palabras, donde lo que importa es vender, tal cual lo pensaba el mismo P.T. Barnum.
Cabe también porque todo lo que ha ofrecido Maradona después de su etapa como jugador ha sido simple y sencillamente irreal de acuerdo con las expectativas generadas.
No se si ocurrió en la vida real o no, pero igualmente es válido el punto: y es que en una de las escenas de la película el periodista James Gordon Bennett, (papel interpretado por Paul Sparks) le pregunta a P.T Barnum: “¿No le molesta que todo lo que vende en el show es mentira?”. A lo que él responde: “¿Le parece que las sonrisas son falsas? No importa de donde vienen, lo valioso es que son reales”. Y cabe esta cita porque lo mismo sucede en Dorados, nadie sabe cómo, por qué o para qué llega Maradona como entrenador, lo importante es que hay sonrisas alrededor del suceso y lo que la noticia vende. Lo que importa es que la gente pagará un boleto y eso no es nada más que un circo, uno que tiene como atracción general a una figura como la de Diego Armando Maradona, que es sin duda para muchos “The Greatest Showman”.
Menudo circo se ha formado... veremos qué tantas sonrisas son capaces de provocar con el pasar de las jornadas.