Paul Romer, Charter Cities y la Innovación en la ZEE de Progreso
Un amigo que estudiaba economía en Oxford fue el que me presentó, hace 20 años, a Paul Romer, quien presentó modelos de crecimiento endógeno, donde se mezclan de manera regionalizada la producción, el capital humano, la inversión en investigación y desarrollo y por supuesto, sus resultados en innovación, lo que le permitió que en este 2018 recibiera el Nobel de Economía. Pudiera decirse, sin el rigor científico merecido, que la premisa de Romer es que el cambio tecnológico es la base del crecimiento económico, aportando los incentivos requeridos para generar una acumulación de capital. Hoy las teorías más prometedoras van a la inversa de lo tradicional: hay talento y por ello llegan más y mejores inversiones de la nueva economía. Unos 10 años después de que conocí las propuesta de Romer me llevé una grata sorpresa al escucharlo en TED sobre las denominadas “Charter Cities”, espacios donde se puede reordenar el crecimiento de manera armónica.
La Zona Económica Especial de Progreso (ZEEP) tiene una muy clara vocación en la denominada Industria 4.0 (I4.0) en donde el florecimiento de las tecnologías de la información en el contexto de la economía del conocimiento ofrecen un paragón sin igual en el país. Progreso ofrece un puerto de comunicaciones marítimas que nos pone a tiro de piedra de Florida y Europa. La economía del conocimiento permitirá fabricar dispositivos inteligentes y software, ofreciendo oportunidades a una industria no-intensiva de recursos hídricos ni energéticos para la puesta en marcha de maquinaria pesada. La ZEEP no debe verse como una ZEE para atraer I4.0 (por ejemplo una fábrica de agujetas de zapatos completamente, con I4.0, no aporta grandes beneficios a la región ni a la movilidad social) sino a las empresas que hacen, desarrollan componentes, innovan o agregan valor para dicha I4.0, desarrollando software y hardware diseñados localmente, integran KPOs, empresas así demandan talento más especializado, sus nóminas son más grandes, compran mejores casas, mejores autos, consumen más en los negocios locales, quieren más arte, más cultura, más educación, etc.
Como dice Romer, las “Charter Cities” requieren cumplir a cabalidad ciertos requisitos (tierra, reglas y compromisos) para ofrecer nuevas oportunidades. El Gobierno de Yucatán ha puesto a disposición de la Federación el polígono federal para la ZEE; la autoridad está operando y terminando de definir las reglas de operación de la Zona. La competencia actual por la atracción de inversiones ha dejado de concentrarse en el costo de la mano de obra; hoy, los grandes capitales están en búsqueda del talento. La tarea pendiente está en manos de la sociedad, la cual, en el mando que otorga a sus autoridades tienen la obligación de llevar a cabo los liderazgos necesarios para hacer realidad lo que bien se ha venido consolidado por 20 años: una región que atraiga talento y contribuya a generar prosperidad en la economía basada en el conocimiento.
Presidente Regional Sureste y VP de Innovación de CANIETI. Desde 2009 es Director de Innovación de Grupo Plenum