Los mercados estarían de ‘fiesta’ en diciembre
El último mes del 2018 se perfila para un desempeño positivo en las principales variables financieras a nivel global, lo que también favorecería a los mercados en México, tras la tregua en la guerra comercial entre Estados Unidos y China y después de despejarse la incógnita del contenido del discurso de toma de posesión del presidente Andrés Manuel López Obrador. Estados Unidos y China acordaron un alto al ‘fuego’ en su guerra comercial, luego de conversaciones de los presidentes Donald Trump y Xi Jinping, las cuales permitieron posponer los aumentos de aranceles que se tenían programados aplicar al gigante asiático, a partir del próximo primero de enero.
“Los mercados reaccionarían favorablemente a la tregua y espero
ver un rebote el lunes” declaró Tim Ghriskey, estratega de inversiones de Inverness Counsel LLC, citado por Bloomberg. Diciembre ha sido un mes tradicionalmente positivo para los mercados accionarios en Estados Unidos, lo cual podría favorecer también a México.
Previo al fin de semana, la ola compradora de activos de mayor riesgo, como las acciones, se había visto favorecida por el mensaje de presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, en el sentido de que la tasa de referencia podría estar cerca de alcanzar un punto neutral. A pesar de las críticas de AMLO al modelo neoliberal, se comprometió a mantener la disciplina en finanzas públicas.
El mercado accionario acumula cinco meses a la baja y en noviembre bajó 5.03 por ciento.
EN MÉXICO
En los últimos 24 años, el indicador del mercado accionario en México, el S&P/BMV IPC, ha subido 3.25 por ciento en promedio durante el últimos mes de cada año, de acuerdo con cifras compiladas por Bloomberg.
El mercado accionario mexicano acumula cinco meses consecutivos en terreno negativo, destacando particularmente el desplome de 11.23 por ciento registrado en el pasado octubre.
En tanto que en noviembre su caída se moderó, sin dejar de ser significativa, al reportar un retroceso de 5.03 por ciento.
FACTORES QUE DAN ‘ESPERANZA’
La administración de Andrés Manuel López Obrador sigue apegada a su línea fiscalmente conservadora; no ha apoyado iniciativas, sobre todo en materia económica-financiera del Legislativo que dañan la confianza, e hizo dos asignaciones centristas en el Banco de México, factores positivos para expertos.
“La política fiscal de la siguiente administración pública federal tendrá importantes desafíos en materia de disciplina fiscal, debido a la ejecución de nuevos programas sociales, la construcción de una refinería y otros gastos comprometidos que implicarán un costo adicional de alrededor de 1.5 por ciento del PIB”, señaló Arnulfo Rodríguez, analista económico de BBVA Bancomer. “El nuevo gobierno federal ha refrendado su compromiso por generar un superávit primario de 1.0 por ciento del PIB en el 2019. Considerando un escenario conservador en el que no aumentaran los ingresos públicos como proporción del PIB el próximo año, lo anterior implicaría recortes al gasto público de 2.5 por ciento del PIB”, estimó. Para Jorge Gordillo Arias, director de análisis económico y bursátil, de CIBanco, el nuevo gobierno debe trabajar para recuperar la confianza de los inversionistas.