En 2 meses, 2,500 carpetas por violencia de género
La jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, dijo que de marzo a abril se han abierto más de 2 mil 500 carpetas de investigación por violencia de género, investigaciones que “no hubieran sido reconocidas como un delito”. Durante la inauguración de las mesas técnicas de acceso a la justicia para mujeres y niñas en casos de muertes violentas de la Ciudad de México, informó que en su administración se han puesto abogadas para mujeres en cada Ministerio Público, lo que ha facilitado las denuncias. Esa medida surgió para “erradicar la impunidad en feminicidios”. Dijo que se han implementado medidas para “preservar la vida de las mujeres” con prevención. el Senado, llamado a cuidar que los estados no atenten contra la gobernabilidad y la República, también dé poca atención a la intentona, adormilado como está por la égida morenista. O quizá sea que también los otros partidos quieren darse un festín con esta nueva manera de adjudicarse cargos.
Hay quienes, dotados de buena fe y confianza en la fortaleza de las instituciones mexicanas, sostienen que lo aprobado por el Congreso de Baja California no se materializará. Ojalá. Sin embargo, el problema es que bajo esa lógica la iniciativa no debió siquiera presentarse en el Legislativo de aquel estado (como ocurrió en más de una ocasión), ya no digamos transitar a una aprobación. Y a pesar de ello ocurrió.
Desde la más alta responsabilidad que cualquier mexicano puede tener, al menos por omisión Andrés Manuel auspicia la ruptura del orden democrático. En Baja California hubo una primera vez. Una alegre. De vitalidad democrática. Asistimos hoy a una segunda primera vez. Una sombría. Donde un Congreso en tiempos del multipartidismo se atreve a desafiar la voluntad de las urnas. La democracia, nuestra democracia, ha sido vulnerada.