Baxico acelera el retiro de dinero del mercado
El Banco de México realizó en julio la mayor venta de Cetes en lo que va del año, vía subastas extraordinarias, lo cual implica restarle liquidez al mercado, quitar dinero de la circulación, con el propósito de evitar presiones alcistas en las tasas de interés o la compra especulativa de dólares, al mismo tiempo que disminuye el potencial a la demanda de bienes y servicios para tener un mayor control sobre la inflación.
El instituto central ayer llevó a cabo una subasta extraordinaria de Cetes a plazos de 182, 259 y 336 días, colocando 40 mil millones de pesos. La demanda por estos instrumentos sumó 66 mil 442 millones de pesos, de acuerdo con datos del Banco de México. La relación entre lo ofrecido en Cetes por el instituto central y lo demandado por los participantes en la subasta extraordinaria fue de 1.66 veces, aunque mostrando marcados contrastes entre los plazos. “A pesar del sesgo más dovish en las minutas de Banxico publicadas la semana pasada, la operación mostró una demanda modestamente más débil a nuestras expectativas con un ratio de cobertura total de 1.66 veces”, indicaron en un documento analistas de Banorte.
En donde se observó un mayor apetito fue en el plazo de un año, al ubicarse la relación entre la oferta y la demanda en 2.04 veces. Los rendimientos se ubicaron en 8.20, 8.16 y 8.05 por ciento en los plazos de Cetes subastados a 182, 259 y 336 días, respectivamente. En lo que va de julio, es la segunda vez que se recurre a este mecanismo tendiente a reducir la liquidez, en medio de tensiones tanto externas como internas, por un monto que implicó un retiro de dinero del mercado por 75 mil millones de pesos.
Las operaciones de compraventa de títulos son uno de los principales instrumentos que Banxico tiene para administrar la liquidez tanto en un horizonte de corto, como de largo plazo.