Regresará Robles el lunes a audiencia
La acusan de ser parte de una red de funcionarios corruptos
Rosario Robles regresará el lunes al Reclusorio Sur para seguir con el desahogo de pruebas. La audiencia de la exsecretaria de Sedatu concluyó ayer a las 21:34 horas y el ministerio público determinó no solicitar una medida cautelar de detención. El juez consideró que le parecía inaudito, pues se debía garantizar la presencia de Robles en la próxima audiencia. La FGR informó que Robles es responsable de daño al erario por 5 mil 73 millones de pesos.
La declaración de tres exempleados de las Secretarías de Desarrollo Social (Sedesol) son parte fundamental de la imputación que la Fiscalía General de la República (FGR) hizo ayer a Rosario Robles, por el desvío de 5 mil 73 millones de pesos en la llamada Estafa Maestra, y por la cual el lunes próximo se definirá si es vinculada o no a proceso por el delito de ejercicio indebido del servicio público, considerado como no grave, por lo que, en un hecho “inédito”, el ministerio público no solicitó su detención.
Los exfuncionarios describieron ante la FGR –con quien colaboran en el caso, a cambio de beneficios procesales–, cómo operaba la estructura de grupo de servidores públicos que suplantaban a funcionarios, falsificaban firmas, sabían del destino de pagos y recursos desviados, además de que recuperaban parte del dinero malversado de la Sedesol.
Señalaron que hicieron del conocimiento de Robles los detalles de dichas anomalías, pero ella fue omisa “de manera dolosa, continua y reiterada” para evitarlo o denunciar el hecho ante su superior jerárquico, en este caso el entonces titular del Ejecutivo, Enrique Peña Nieto.
Los fiscales presentaron los testimonios de José Antonino, María del Carmen Gutiérrez y Marcos Salvador Ibarra, quienes trabajaron con Robles entre 2014 y 2018, y quienes también imputaron a Emilio Zebadúa, uno de los hombres más cercanos a Robles.
Los dichos de esas tres personas, según la FGR, se sustentan con documentales, entre ellas 27 convenios ilegales con universidades públicas que sirvieron para triangular, a través de empresas fantasma, los recursos del erario. La audiencia de imputación a Robles se prolongó por 10 horas y media y en ella la defensa de la exfuncionaria tuvo varios reveses al negarle la posibilidad de diferir la audiencia, lo que le valió el regaño del juez Felipe de Jesús Delgadillo, quien dijo que no iba a permitir que “tramposamente” se intentara posponer la sesión.
Al final de la audiencia, la defensa de Robles logró “rescatar” que sea hasta el próximo lunes a las 18:00 horas cuando se defina la situación jurídica de la exsecretaria de Estado. La Fiscalía, de manera inusual, según dijo el propio juez, no pidió medidas cautelares para ella, como la prisión preventiva, pero sí pidió que le advirtieran el riesgo de no acudir a la otra audiencia. Al respecto, al final, de manera sorpresiva y sin consultar a sus abogados, Robles pidió la palabra para decir que sí asistirá a la audiencia. “Estuve aquí totalmente de forma voluntaria, estaba fuera del país cuando me enteré de esta situación y supe del citatorio. Regresé respetando la ley, estaré aquí como usted lo ha solicitado”, dijo Robles al juez.