Nada ha cambiado
El lunes decenas de mujeres marcharon exigiendo justicia por los casos de violación en los que son señalados policías de la Ciudad de México como presuntos responsables. Protestaron en la sede de la Secretaría de Seguridad Pública capitalina porque están hartas de la impunidad, porque en México son asesinadas nueve mujeres al día. Porque no pueden permitir que este caso se vaya al final del escritorio de las prioridades del gobierno, como siempre ocurre.
La respuesta del gobierno de la ciudad fue lamentable, donde tenían que ver un grito de desesperación y una exigencia de justicia vieron una provocación. Exigir el esclarecimiento de la violación de una menor les costó pintura en algunas paredes, varios vidrios rotos y brillantina sobre el responsable de la seguridad de la Ciudad de México; yo creo que les salió barato, ellos no vieron lo mismo, creen que fue desproporcionado. El precedente es terrible.
Horas antes de esta protesta aparecía degollada tras casi dos días de haber desaparecido, Nancy Flores García, quien trabajaba en la Coordinación Administrativa de la Primera Visitaduría General de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos; la encontraron en el municipio mexiquense de Villa de Allende, pero desapareció el sábado pasado en la colonia El Tanque, de la alcaldía Magdalena Contreras, de la Ciudad de México. Nancy tenía 40 años. La CNDH ha exigido lo mismo que las decenas de mujeres que protestaron el lunes pasado, “que las autoridades lleven a cabo una investigación exhaustiva de los hechos, a fin de que se deslinden responsabilidades y se garantice que el caso no quede en la impunidad”.
Así el presente. ¿Cómo está el pasado?
Hace un año exactamente, en este mismo espacio, escribí “Por Gabriela”: ¿Quién es Gabriela? La incesante violencia a la que estamos acostumbrándonos en esta ciudad ya no nos permite recordar nombres ni rostros. Pero este se me quedó grabado. Una mujer de 25 años que había sido vista por última vez en un parque de la colonia Del Valle mientras paseaba a su perro la noche del domingo 29 de julio. Esa noche desapareció. Horas después de que su familia reportó su desaparición se dio a conocer el hallazgo de su cuerpo, que, de acuerdo con reportes periodísticos, se encontró
No sé si alguna vez se acabe esta trágica época de feminicidios, ni siquiera sé cómo será recordada Para las mujeres no hay respiro en esta ciudad, al menos no hoy ni ayer ni hace un año
maniatado y con un tiro en la cabeza la madrugada del 30, en la esquina de Minas de Arena y Sur 114, en la colonia Cove, en la delegación Álvaro Obregón. Como pasa en la lista de feminicidios que a diario se cometen en la que un día fue una ciudad segura, hasta ahora no se ha detenido a nadie y no se conoce a ciencia cierta el móvil del crimen.
Nada ha cambiado, en la Ciudad de México se siguen asesinando a las mujeres y pasamos de la indiferencia de las autoridades a sentirse atacados.
No sé si alguna vez se acabe esta trágica época de feminicidios y violencia, ni siquiera sé cómo será recordada, quiénes serán las encargadas de contar esta historia, ¿seremos otros en 20, 30, 50 años? ¿Volverán a caminar seguras las mujeres en esta ciudad? ¿Alguna vez lo hicieron?, se preguntan jóvenes entre los 15 y 30 años. Para las mujeres no hay respiro en esta ciudad, al menos no hoy ni ayer ni hace un año.