La defensa.
Ignacio Mier destacó que la 4T aprobó una reforma al Poder Judicial “para tener un marco jurídico que garantice no solamente el debido proceso, sino la administración expedita de la justicia y el combate a la corrupción que era una lacra que estaba presente en el Poder Judicial”.
La bancada del PRI en San Lázaro aclaró que “la alianza Va por México no es un asunto personal; preocupa que siendo un gran demócrata, el Presidente esté nervioso y que tenga tanto ‘pica-pica’ con este tema”. A través del vocero del grupo parlamentario, el diputado Héctor Yunes, la fracción tricolor planteó que “más allá de las diferencias ideológicas o políticas entre los partidos que la integran, la alianza significa la preservación del Estado mexicano”. “Esa es la razón por la que logramos llegar a un acuerdo; necesitamos un Estado fuerte, no un Presidente fuerte, eso quedó en el pasado, ya que en las condiciones actuales, un Presidente fuerte implica el debilitamiento de las instituciones, que es el origen de muchos de los problemas”, advirtió. Precisó que “es muy saludable que el Estado tenga en la práctica los contrapesos que se establecen en la Constitución, más allá del partido que se encuentre en la Presidencia, y resulta fundamental el papel de la Cámara de Diputados, ya que es uno de los más importantes”. Sobre las expresiones presidenciales en torno a que la alianza es sólo una estrategia para controlar el presupuesto, el PRI respondió que “si realmente se desea acabar con la corrupción, pueden empezar con Pío y Felipa, y seguir con la CFE, el IMSS y transparentar tantas adjudicaciones directas; porque a pesar de que no dejan de hablar de corrupción, no han sido capaces de lograr sentencia en un solo caso”. Lamentó la cancelación o disminución presupuestal a programas “que habían demostrado su efectividad, y ahora el presupuesto no llega a los pobres, ni a los desempleados, a los pequeños comercios, los campesinos, ni a las amas de casa, sólo le llega a quienes ven como potenciales votantes”.