Trump no acepta culpa por toma del Capitolio y acusa a antifascistas
Gobierno llega a su fin, reconoce Pence, quien promete “transición sin tropiezos”
Para aprobar el impeachment los demócratas necesitan 17 votos republicanos
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, no aceptó su responsabilidad de fomentar el asalto a la sede del Congreso la semana pasada, que dejó cinco muertos, decenas de heridos y al menos 100 detenidos. Agregó que el discurso que pronunció a sus seguidores el miércoles pasado fue “totalmente apropiado”, en sus primeras declaraciones desde que una turba de sus partidarios tomara por asalto al Capitolio luego de animarlos a que lo hicieran. De hecho, Trump soltó la versión –en una conversación privada– de que el movimiento Antifa (antifascista) realizó los actos violentos. Asimismo, el mandatario declaró que los procedimientos en el Congreso para someterlo a juicio político, por segunda vez, son “absolutamente ridículos” y están causando “enorme enojo” en la nación, pero que no está a favor de la violencia. Trump indicó que los gigantes de las redes sociales como Twitter y Facebook cometieron un “error catastrófico” al suspender sus cuentas, acusándolo de incitar a la violencia antes de que sus partidarios tomaran el Congreso. “Están dividiendo y dividiendo y están mostrando algo que he estado prediciendo durante mucho tiempo”, señaló.
Mientras, el vicepresidente Mike Pence señaló a los gobernadores que “nuestro tiempo” llegó a su fin y prometió una “transición sin tropiezos”. Pence no da señales de estar dispuesto a invocar la Enmienda 25 de la Constitución para destituir al mandatario, por lo que la Cámara de Representantes empezará hoy a debatir los artículos para un segundo impeachment ( juicio político) contra Trump, por incitación a la insurrección en el asalto al Congreso. Ello sería exactamente una semana antes de la toma de posesión de Biden.
La Enmienda 25 es una norma constitucional que permite remover del poder al presidente, por incapacidad para gobernar.
Los demócratas necesitarían el apoyo de 17 senadores republicanos para conseguir los dos tercios de la Cámara alta necesarios para destituir al presidente. En el juicio político anterior, por obligar al gobierno de Ucrania a investigar a Hunter Biden, hijo del entonces candidato demócrata a la Casa Blanca, por corrupción, sólo el senador republicano Mitt Romney apoyó la destitución. Sin embargo, ahora otros tres senadores han mostrado en público una postura favorable a la destitución. Los senadores de Alaska, Lisa Murkowski; Pensilvania, Pat Toomey, y Nebraska, Ben Sasse.
El líder republicano en el Senado, Mitch Mcconnell, ha asegurado a sus compañeros de partido que no se votará hasta después de la toma de posesión de Biden. Pese a que Trump ya habría dejado el cargo, si los demócratas prosperan, podrían inhabilitarlo para buscar la Casa Blanca, en 2024. Pero reconoció que Trump cometió delitos y que le complace que los demócratas busquen acusarlo, informó el diario The New York Times.
“Nunca ha habido una traición más grande por parte de un presidente de Estados Unidos a su cargo y su juramento a la Constitución”
LIZ CHENEY /
Número 3 de los republicanos en la Cámara de Representantes
SE SUMAN. Senadores republicanos han mostrado en público una postura favorable a la destitución de Donald Trump y votarían a favor.