Expertos ven riesgosa postura del Presidente
“Estaría renunciando a un posible papel de socio muy cercano de EU”, advierten
“El Presidente sólo está buscando irritar al principal socio comercial de México con anuncios como el de que no irá a la Cumbre de las Américas si no va todo el continente”, aseguró la asociada del Consejo Mexicano de Asuntos Internacionales (Comexi), Érika Ruiz.
En entrevista con El Financiero, la experta declaró que “sería un gravísimo error y tensaría todavía más una relación que se ha ido desgastando con el tiempo, y que además tenemos una cantidad increíble de temas muy complejos que requieren la máxima interlocución”. Detalló que al no ir a la cumbre, México estaría renunciando a un posible papel de socio muy cercano de Estados Unidos, al igual que estaría poniendo en duda que es un integrante comprometido y formal. Según la académica, en estos momentos “Estados Unidos tiene que saber con quién cuenta y con quién no, porque estamos ante el retorno duro de la geopolítica”.
Para Ruiz, estos actos abundan en acciones que han demostrado que México puede no estar por completo del lado de Estados Unidos, como fue la negación de implementar sanciones económicas a Rusia.
Para Iliana Rodríguez, directora del Departamento de Derecho y Relaciones Exteriores del Tecnológico de Monterrey, lo que estamos viendo es una contradicción en el discurso del Presidente.
Afirmó a El Financiero que “puede ser solidario con la causa de otras naciones, con otras formas de gobierno, y dada la Doctrina Estrada en México, que implica respetar la libre determinación de los pueblos para elegir gobernantes, en ese sentido, el Presidente tendría que respetar la postura de Estados Unidos”. Y aunque la académica consideró que “el riesgo está en que pasemos a ser un país en un nivel de interrelación mucho más bajo o menos activo”, con un distanciamiento por parte del gobierno de Estados Unidos, rechazó que se puedan dar sanciones económicas, ya que el intercambio comercial queda
Arturo Sarukhan
protegido por el acuerdo entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), que cuenta con diferentes mecanismos para asegurar su implementación.
Gustavo López, investigador del Tec de Monterrey, consideró que la audiencia que busca el presidente López Obrador con su mensaje es mexicana, se enfoca más en sus seguidores que en la Casa Blanca. “Es un posicionamiento que tiene su principal impacto aquí en México, porque aparece como si fuera independiente. Se acerca a los grupos que en algún momento lo habían sentido lejano (la izquierda más tradicional)”, detalló a El Financiero. Para el investigador, no existe un riesgo de sanciones, ya que Estados Unidos tiene la atención en otro lado.