Un juez otorga la suspensión definitiva del tramo 5 del tren
El fallo favorece a Defendiendo el Derecho a un Medio Ambiente Sano que reclamó la falta de la MIA en la obra
Un juez federal otorgó una suspensión definitiva para detener las obras en el tramo 5 del Tren Maya, anunció la organización Defendiendo el Derecho a un Medio Ambiente Sano (DMAS).
En un comunicado, DMAS estableció que un juez del Juzgado Primero de Yucatán concedió la suspensión al reconocer que la construcción no cuenta con la manifestación de impacto ambiental (MIA), misma que tenía que estar lista antes de haber iniciado la obra. La organización recordó que el Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur) y Fonatur-tren Maya habían argumentado que iniciaron el trámite. Sin embargo, la organización señaló que no se ha concluido el procedimiento. El juez encargado del caso fue Adrián Novelo, juez primero de Distrito en Yucatán, que concedió la suspensión definitiva en el amparo 884/2022, promovido por diferentes grupos de ambientalistas. Con esto se frenaron los trabajos del tren entre Playa del Carmen y Tulum. Dentro de la publicación, la organización expone que el juez estableció que “se concede a DMAS, AC, la suspensión definitiva para el efecto de que Fonatur y Fonatur-tren Maya suspendan o paralicen cualquier acto que tenga como finalidad la continuación de la construcción del tramo 5 del proyecto Tren Maya”. Además, agregó que con esto se prohíbe “la ejecución de obras relacionadas con su construcción, infraestructura, remoción o destrucción de la biodiversidad del terreno o cualquier otra actividad que implique su ejecución material”. Según DMAS, el juez reconoció el peligro inminente de que se produzca un daño irreversible al continuar con las obras, al igual que reconoció el interés legítimo de la organización de proteger los ecosistemas.
Este tramo estaba dispuesto a ser construido por la empresa México Compañía Constructora, según la página oficial del Tren Maya, que ganó la licitación en enero de 2021 con un monto de 17 mil 815 millones de pesos.
Al momento que fue otorgada la licitación el tramo 5 estaba planeado para ir a lo largo de la carretera 307, pero a finales de ese año Fonatur decidió cambiar la ruta una vez que recibió varias quejas por parte de los hoteleros de la región. Dentro de la demanda, las organizaciones expusieron que el cambio de ruta se decidió sin haber realizado estudios de impacto ambiental y de calidad de suelo, advirtiendo que el nuevo camino pasaría sobre ríos subterráneos y pondría en riesgo a la flora y fauna de la región.
El permiso para la construcción de este tramo se dio gracias a un decreto publicado por el presidente López Obrador, en noviembre del año pasado, con el cual buscaba exentar de todos los trámites a la construcción del Tren Maya. Según el Presidente, este decreto buscaba “agilizar trámites”; sin embargo, permitía que no se pidieran todos los procesos administrativos
que indica la ley antes de poder comenzar la construcción.
Si bien esta suspensión es definitiva, el gobierno federal aún puede impugnar la decisión ante el Tribunal Colegiado de Trabajo y Administrativo de Mérida, aunque mientras se resuelve el asunto, la suspensión quedaría vigente. Sin embargo, el pasado 13 de mayo el tribunal confirmó la suspensión provisional que otorgó el juez Novelo, mientras analizaba la evidencia que lo llevó a otorgar la suspensión definitiva este lunes. Dentro de su resolución, los magistrados del Tribunal Colegiado consideraron que el decreto presidencial no era justificación suficiente, ya que no sustituye a la MIA, por lo que no se podría llevar a cabo la obra sin esta evaluación.