Comisiones bancarias, piedra en el zapato de la inclusión financiera
A pesar de los avances en tecnología y digitalización, la inclusión financiera sigue siendo un campo de batalla para las autoridades financieras de México. Julio Carranza, de la Asociación de Bancos de México; Javier de la Fuente, de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores, y Oscar Rosado, de la Condusef, enfrentan el desafío de derribar las barreras que limitan el acceso a los servicios bancarios para la población.
Entre estas barreras, destacan las comisiones por pagos con tarjeta en comercios y el uso de cajeros automáticos para no clientes, prácticas que han contribuido a las ganancias récord de los bancos en 2023, alcanzando la cifra de 272 mil millones de pesos.
Resulta revelador que el 70 por ciento de estas utilidades se concentren en las arcas de cinco grandes entidades: Santander, Citibanamex, Scotiabank, Banorte
y BBVA. Estas instituciones, que casualmente lideran la tabla de comisiones por retiro en cajeros para usuarios no afiliados, reflejan cómo estas tarifas se traducen directamente en sus elevadas ganancias.
Un estudio de Statista señala que Santander duplicó sus ingresos por comisiones en nueve años, y tanto Citibanamex como BBVA obtienen un porcentaje significativamente mayor de sus ingresos por este concepto en México en comparación con otros mercados.
La Convención Bancaria de Acapulco se aproxima, y con ella, la expectativa de si los candidatos presidenciales enfrentarán el tema de las comisiones y se comprometerán a promover condiciones más favorables para los usuarios, o si preferirán centrarse en ganar apoyos políticos, dejando en segundo plano un asunto crítico para la economía de los ciudadanos.