RESURGEN DE LAS CENIZAS
SANTIAGO, Chile.- Como un Ave Fénix, las nadadoras artísticas mexicanas Nuria Diosdado y Joana Jiménez resurgieron de una temporada nadando entre adversidades, la cual coronaron con la primera medalla de oro en la historia de la natación artística en unos Juegos Panamericanos, además de obtener un pase directo a los Juegos Olímpicos de París 2024.
La imagen era elocuente: Joana Jiménez arrodillada, con las manos en el rostro al borde del llanto, y Nuria Diosdado en un emocionado abrazo con su entrenadora de toda la vida, Adriana Loftus. Ofelia Pedrero extendía su mano a Joana para levantarla, mientras veían en las pantallas cómo sus nombres ascendían al primer lugar, augurando un triunfo inminente ante Estados Unidos, sus acérrimas rivales.
Las ondinas mexicanas han enfrentado competencias fuera de las piscinas este año. Sus principales desafíos han sido la falta de becas deportivas por parte de la Conade, la recuperación de estas a través de un proceso legal, vender trajes de baño y toallas mientras entrenaban y aliarse con marcas para generar ingresos para la temporada. Todo esto, sumado a adaptarse a las exigencias del nuevo reglamento, que valora un mayor grado de dificultad.
Su fortaleza ha sido como fuera del agua.
Por ello, eligieron una coreografía sobre el Ave Fénix, que simbolizaba su resurgir. No faltaron simbolismos, ya que compitieron con el mismo traje de baño que utilizaron en Lima 2019, con el que consiguieron la clasificación olímpica a Tokio 2020, un evento tras el cual Nuria consideraba retirarse de la natación artística. Hoy, ya está clasificada para París 2024, donde busca su gran despedida.
“Sentimos que hemos resurgido, como el Ave Fénix, ambas hemos salido adelante.
Esto sabe a trayectoria, a tenacidad, a saber que todo ha valido la pena, no importa los obstáculos que enfrentemos.
El equipo de natación artística siempre va un paso adelante porque tenemos el corazón y el deseo de triunfar”, confirmó Nuria Diosdado, atleta del Azúcar Sport Team.
El objetivo final es clasificar al equipo completo para París, un logro que México no ha tenido desde Atlanta 1996.
Estamos extasiadas. Estaba al borde del llanto, aún no había asimilado el resultado histórico para el país.‘Lo logramos’, fue lo primero que nos dijimos, y ‘somos campeonas panamericanas, las campeonas de América...
Lo que hagamos quiero que sea histórico, que seamos personas disruptivas y que nunca nos achiquemos. Poder vivir un triunfo panamericano nunca antes visto es muy motivante...