Agradecen el trabajo
Ayer se conmemoró el Día de la Santa Cruz, una festividad religiosa que en México y otros países de Latinoamérica fue adoptada por los trabajadores de la construcción como suya, por lo que celebran el Día del Albañil. Para ellos es una oportunidad de agradecer el trabajo, cada vez más difícil y escaso.
Como muchos otros albañiles, Armando González Jiménez, quien tiene 35 años en el oficio, celebró su día trabajando y junto con sus compañeros colocó una cruz de madera adornada con flores en la construcción de los puentes que conectan las presas de la ciudad.
Actualmente dichos trabajadores están laborando en citado corredor, pero se tomaron unos minutos para colocar una cruz y agradecer por lo recibido y pedir para no sufrir accidentes o caídas durante su trabajo.
Cabe mencionar que la Cámara Mexicana de la Industria (CMIC) delegación Chihuahua aprovechó para reconocer que este gremio es esencial para la edificación de la infraestructura que el país necesita, por tal motivo agradecieron y conmemoraron su labor y esfuerzo. Asimismo CMIC Nacional se sumó a la celebración y reafirmó su reconocimiento a todas las personas que forman parte del gremio, “ya que con su labor contribuyen al desarrollo de México”.
Este 3 de mayo se conmemoró el Día de la Santa Cruz, una festividad religiosa que data de los orígenes en la antigua Jerusalén; sin embargo, en México y otros países de Latinoamérica los trabajadores de la construcción adoptaron ese día como suyo y celebran el Día del Albañil.
De acuerdo con información proporcionada por el padre Gustavo Sánchez Prieto, vocero de la Arquidiócesis de Chihuahua, a diferencia del resto de la Iglesia universal, que celebra la fiesta del Día de la Santa Cruz el 14 de septiembre, en nuestro país se mantiene la fiesta el 3 de mayo.
CMIC LOCAL y nacional expresaron su gratitud al gremio al reconocer que ellos con su esfuerzo contribuyen al desarrollo de México
“Especialmente los albañiles dan realce a esta fecha, destacando en las construcciones la Santa Cruz, adornada en muchos casos. Para ellos es una oportunidad de agradecer el trabajo, cada vez más difícil y escaso en este México, al tiempo que encomiendan a Dios su vida, su familia y su trabajo”, manifestó el sacerdote.
Los católicos mexicanos se unen pidiendo al Señor por todos los comprometidos en la construcción, no solamente de edificios sino de este México, “tan necesitado de sabiduría, de honestidad y participación responsable de cada uno, desde su propia trinchera. Dispuestos a compartir la Cruz de Jesús y la de cada hermano, con la fuerza del Espíritu, acompañados por la intercesión maternal de María de Guadalupe y San José”, expuso.