Una agenda sindical con perspectiva de género
Para un servidor, el lugar que gracias al apoyo de todas y todos ustedes hoy puedo ocupar como Secretario General de la combativa Sección 8 del SNTE, es un honor y motivo de orgullo el mantener una agenda con perspectiva de género, donde hoy por hoy las mujeres han consolidado y manifestado un profesional liderazgo para actuar en la defensa de los derechos salariales, laborales, prestacionales, profesionales y de seguridad social.
Siendo el 8 de marzo de 1917, durante la I Guerra Mundial, en Rusia, cuando valientes y revolucionarias mujeres rusas se declararon en huelga en demanda de 'pan y paz', y en 1910 la Internacional Socialista creó el Día Internacional de la Mujer, entonces sin fecha definida, siendo hasta 1917 cuando por parte de la ONU quedo estableció como día oficial el 8 de marzo.
En este contexto les comento que para los profesionales de la educación, nuestro compromiso en la creación de consciencia, el respeto y la igualdad entre todas las personas, creemos firmemente que nuestra sociedad está evolucionando y como formadores, estamos conscientes de nuestra responsabilidad. Al iniciar esta gestión sindical profundizamos en la democracia, marcando un hito en la elección de cada representación sindical; mediante el voto libre, directo, nominal, personal e intransferible.
Los más de 50,000 agremiados a esta sección sindical con profunda libertad, decidió quien los represente desde cada instancia de nuestro organigrama, derivado de este ejercicio transparente me llena de satisfacción poderles compartir que el 45% de nuestra estructura sindical es encabezada por mujeres, lo defino con amplia satisfacción porque es motivo de orgullo que nuestro instituto sindical abone desde la pluralidad a las principales causas sociales. Órganos de Gobierno Sindical, Coordinaciones Sindicales, Secretarías Delegacionales, Representaciones de Centro de Trabajo y de Escuela, son encabezados por trabajadoras de la educación que han impulsado la actividad sindical desde todas sus vertientes, donde aparte de ser sindicalistas, son madres, amigas, hermanas, activistas, entre otros roles que desempeñan para contribuir al desarrollo educativo, político y social de nuestro estado y de nuestro país.
Lo comenté en mi anterior artículo de opinión el mes pasado, todo lo que en conjunto hemos logrado es producto de la unidad, mi compromiso con este tema es total, pues lo que hoy con gran empeño estamos consolidando es mucho mas grande que mi propia existencia, espero que al paso de los años la historia me recuerde y recuerde a las mujeres que me otorgaron el privilegio de caminar a su lado en esta loable labor como hacedores de un sindicato profesional y humano con visión de futuro. Vaya para todas las trabajadoras de la educación, así como para todas las mujeres de este gran estado mi respeto, admiración y reconocimiento, sin duda alguna ustedes son TAN GRANDES COMO CHIHUAHUA.