Tiran malla migrantes y cruzan 300
Tras permanecer horas en el muro fronterizo fueron trasladados a un Centro de Procesamiento por agentes
JUÁREZ.- Alrededor de 300 migrantes que permanecieron en el bordo del río Bravo por varios días, derribaron la malla protectora de la puerta 36, que también es cubierta con alambre de púas con una altura de tres metros, mientras que militares de la Guardia Nacional de Texas, al verse superados en números, decidieron dejarlos pasar y formarlos en el muro fronterizo esperando a ser trasladados a un Centro de Procesamiento.
Por varios días, los migrantes se estuvieron concentrando en la puerta 36, ante la nula vigilancia de los agentes del Instituto Nacional de Migración. Ayer, hicieron actos de presencia pero sólo contemplaron el levantamiento de los migrantes y el enfrentamiento verbal con los militares de la Guardia Nacional Texana, al tratar de contenerlos.
El grupo de migrantes logró derribar la
del cauce del río Bravo siguen instaladas las improvisadas casas de campaña, en espera de nuevos inquilinos
malla e inmediatamente se postraron en el muro fronterizo, fueron formados por los militares estadounidense esperando que llegaran camiones del CBP para trasladarlos al Centro de Procesamiento, donde se definirá su situación en la solicitud de asilo político.
En cuatro camiones fueron trasladados a los Centros de Procesamiento, por el área del bordo del Río Bravo a la altura de la puerta 36.
Luego de reinstalar los alambres de púas, los elementos de la Guardia Nacional de Texas se anticiparon a la malla para evitar que continuaran cruzando.
Al otro lado de la malla continúan las casas de campaña instaladas, alrededor de quince, en su mayoría con cobijas y algunas con bolsas, además encendieron fogatas con ropa y mochilas.
“Queremos agua, queremos comida”, gritaron algunas de las personas en situación de movilidad, ya del lado americano del Río Bravo.
Algunas personas cruzaban nuevamente el río al lado mexicano para ir a las tiendas a comprar principalmente agua y algo de alimento. “Aquí esto es duro, complicado, tres días aguantando frío”, informó un migrante hondureño.
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