Omar puso lo que le sobra a los mexicanos
México estaba crecido, goleó a Holanda en semifinales, ganó portadas, reflectores, Carlos Vela era seguido por el Arsenal, pero faltaba ganarle a Brasil en la final. El futbol no iba a ser suficiente para superar a la Verdeamarela. El Tricolor tuvo que poner lo que siempre le sobró en ese torneo. Omar Esparza lo contó: “Acceder a la final fue una emoción grande, le ganamos bien a Holanda, mentalmente estábamos listos para jugar contra Brasil. Hubo momentos de ansiedad, nervios, pero lo supimos controlar”, dijo Omar.
Brasil traía magia, Marcelo estaba en esa Selección: “Sabíamos que Brasil era difícil, son potencia en el futbol, pero nosotros habíamos hecho buenos partidos, fuimos creciendo en el torneo”, recordó.
Giovani dos Santos y Carlos Vela se unieron para marcar el primer tanto del juego, ese dúo fascinó a todo el mundo, pero siguió el gol de Omar: “No se me olvida esa anotación, no era goleador, pero me tocó hacerle un gol a Australia y luego a Brasil en la final, no lo esperaba”, dijo Esparza.
Omar retrocedió muchos años atrás, como si estuviera de nuevo en el estadio Nacional: “Teníamos la pelota, acabábamos de marcar el 1-0, corro a la espalda de Marcel, César Villaluz me da el pase, el balón alcanza a rozar a Giovani, pero me queda botando, lo único que pienso es en pegarle y salió un gran gol”.
Enseguida vino la anecdótica celebración: “No tenía un festejo planeado, lo único que hice fue correr y hacer una seña de que los mexicanos los tenemos bien puestos, que éramos capaces de todo”, expresó. “Se formó un gran grupo humano y de futbolistas, su mentalidad fue la de ganar”, cerró el jugador de Los Cabos FC.