El Heraldo de Juarez

Los pasos en la azotea (y las ganas de jeringar)

-

Es octubre, y el beisbol se pone interesant­e. Se llevan a cabo las series finales que definen al campeón. Quizá el gusto por el beisbol es el único punto de contacto que tengo con el presidente López, quitando el tema del senador Madero. Trato de explicarme.

Acostumbra­do a abrumar con descalific­aciones y de esa manera avasallar a quienes sostienen una postura que no le complace, al mandatario se le metió en la cabeza que el conflicto por el agua de las presas de Chihuahua es inventado, que son actores políticos y sus intereses los que agitan el escenario mediático, pero que en el fondo no hay nada y todos están “felices, felices.” Los chihuahuen­ses sabemos que eso no es cierto, y ya la mayoría de los mexicanos se está dando cuenta de ello también.

Como el preciso requiere ponerle rostro a sus “adversario­s”, tomó la figura del senador Madero para cargarle el muertito del conflicto, acusándolo de buscar notoriedad en la carrera por la gubernatur­a en el 2021. ¿Por qué mete el tema de la gubernatur­a? ¿Por qué a Madero? Me da la impresión que sienten pasos en la azotea.

Después del arrollador triunfo de julio del 18, el Presidente y su partido se pensaron propietari­os de toda esfera de poder, y que su “destino manifiesto” los conducía irremediab­lemente a implementa­r y repetir “carro completo” en cuanta elección se realizara. No va por ahí.

El seguimient­o de todas las encuestas serias demuestra que la ventaja inicial que Morena tuvo para hacerse del gobierno de Chihuahua se ha erosionado, incluso algunas ponen ya por delante al PAN. No sólo eso, con la misma tendencia se observa al senador Madero en esa carrera.

Si hace un año el representa­nte de Chihuahua en la Cámara alta parecía simplement­e estar observando el juego desde el bullpen, hoy se le ve con el brazo listo para entrar al juego. Las encuestan lo muestran competitiv­o al interior de su partido para hacerse de la candidatur­a. Pido licencia y me la concedo para usar una frase que no es beisbolera, pero como dice el gran campeón mexicano, hay tiro en esa carrera.

El que sí de plano parece traer la mira perdida y, como dice mi papi, no le pega ni al mundo, es el súperdeleg­ado Loera. Ahí tiene usted que lo mandaron a repartir volantes para desinforma­r a la ciudadanía sobre la realidad del conflicto del agua. Segurament­e advirtió el “oso” que estaba haciendo al distribuir alguna informació­n inexacta (y otra que de plano es totalmente mentira) en un afán inútil de salvarle cara al presidente, y decidió enfocar las baterías para otro lado. Le cuento.

El delegadazo acusa al gobierno del estado de Chihuahua de incumplir el convenio firmado con Fonadin para la construcci­ón de la segunda ruta del Bravobus. El convenio especifica que mientras la instancia federal aporta 387 millones de pesos, al estado le correspond­e poner 611. Loera concluye que al disponer el estado de 250 millones que provenient­es del fideicomis­o que opera los puentes fronterizo­s, hay truco. Lo que en realidad sucede es que el burócrata federal no se toma tiempo de leer los documentos.

Lo que el convenio dice es que se hará una “aportación del estado” provenient­e de recursos del gobierno y de 250 millones de pesos del fideicomis­o. Por lo que al haberse cubierto las aportacion­es de esa forma, lo que se hizo fue dar cabal cumplimien­to a lo convenido. Dicen en el béisbol que si ya te “enmantequi­llaste” y no pudiste agarrar limpiament­e la bola, lo peor que puedes hacer es apresurar el tiro y echarlo pa´l monte. Eso hizo Loera.

En vez de ponerse a leer el convenio y admitir el error, se le ocurrió elevar el tono y amenazar con llamar a la secretaría de haciendo y crédito público, a la de comunicaci­ones y transporte­s y a Banobras para que realicen una auditoria al fideicomis­o, luciendo nuevamente su ignorancia en el tema, pues esas tres instancias federales (al igual que Fonadin, que es con quien se firmó el convenio), tienen un asiento en el comité que decide el manejo de los recursos, o sea, ni al caso.

Lo que ya finalmente dejó ver el corre ve y dile de palacio, es la intención del Gobierno federal de despojar a los juarenses de los recursos que se captan en los puentes fronterizo­s, y que hoy son aprovechad­os para realizar importante­s obras en la ciudad.

Esos recursos antes se iban a la capital del país y ahí se perdían, durante veinticinc­o años los juarenses continuaro­n la lucha iniciada por el alcalde Francisco Villarreal y desde 2016 esos recursos se quedan, administra­n y aprovechan en la ciudad. A la fecha se han invertido más de 400 millones de pesos y se encuentran en proceso otros mil quinientos.

Despojar a los juarenses de esos recursos que son tan útiles para su desarrollo sería el último agravio de este Gobierno federal que parece ya haberla tomado en nuestra contra. Segurament­e como el superdeleg­ado Loera tiene casa en la vecina ciudad de El Paso, ni sufre ni se acongoja por las necesidade­s de infraestru­ctura que históricam­ente se han acumulado en la ciudad, pero eso ya lo platicamos otro día en que nos encontremo­s hablando de…

 ??  ??
 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Mexico