HERENCIA Tarahumara
EL LIBRO MIRADA INTERIOR DE ANA CELY PALMA LOYA RECUPERA LAS ENSEÑANZAS, CANTOS Y FILOSOFÍAS FAMILIARES PARA ESTABLECER LAS BASES DE LA POESÍA RARÁMURI
CUANDO UN RARÁMURI CUENTA, EL TEXTO COMPARTE EL CONOCIMIENTO’
ANA CELY PALMA
ENSAYISTA
Para Ana Cely Palma Loya (Chihuahua -1981), autora de Mirada interior / Pa’chána e’néala (UNAM), existe una importante diferencia entre la escritura y la oralidad, entendiendo a esta última “como el soporte acústico de la palabra escrita que resguarda la memoria”.
En entrevista, la también activista por la preservación de las culturas indígenas compartió que su libro de ensayos reúne las enseñanzas familiares de quienes la influenciaron en su infancia como el poeta Juan Gardea, su tío Marcelo Palma y su abuelo Erasmo Palma, Premio Nacional de las Ciencias y las Artes 2002, quien promovió la cultura de su pueblo a nivel nacional e internacional.
Además, explicó que “el rarámuri no se imagina a sí mismo como escritor, pues su primer oficio es cantar, y cantar es un acto comunitario cuyo servicio nadie cuestiona porque es tan necesario como cualquier otro”, por lo que cantar y contar son primordiales para transmitir la cultura.
“La poesía es nuestro lenguaje primario,el de nuestros antepasados y el de los antepasados de todos que legan este mundo un lenguaje que nombra las cosas”, dijo la ensayista, quien resaltó que este género, en la cultura rarámuri, busca siempre sonar como la naturaleza, ya que, de acuerdo con ellos, todos los sonidos provienen de ella.
Para Palma, existe una diferencia entre la literatura y la poesía rarámuri, la primera es poner por escrito los cantos, las historias y los principios de los antepasados; la segunda es la expresión escrita del canto que imita, contiene su belleza y la transmite a los demás. “Cuando un rarámuri cuenta, el texto canta e informa sobre los saberes de la comunidad y éstos incluyen la definición del bien y del mal en nuestras acciones; un escritor es un comunicador de su saber”, finalizó.