CAMPECHE PONE EL EJEMPLO ¡Y EL TONO!
Se ve una gobernadora sorda a los reclamos de la población y a su cuerpo de policías. Ha olvidado que los “tiempos” en política son importantes
Layda decidió actuar como cacique, como lo fue su padre, priista de cuna
Layda Sansores pasará a los libros de historia por ser el principio del fin de Morena (además de por su tinte de pelo rojo intenso). Ha iniciado en lo local el resquebrajamiento del obradorismo. Le ayudan otros gobernantes de Morena y aliados, quienes le restan a ese movimiento al mostrar abandono de sus obligaciones, soberbia y un boato mal disimulado muy lejos de la austeridad republicana.
Desde la llegada de Layda a Campeche (2021), la inseguridad en esa entidad aumentó del 38.3% al 55.9%. Inseguridad que impactó en las mujeres policías enviadas al CERESO de San Francisco Kobén el 15 de marzo, donde sufrieron abusos por parte de los reos. Las peticiones de las policías fueron desdeñadas y, en razón de ello, dichos reclamos llegaron a las calles.
Ante lo que ha sido desprecio de la autoridad hacia sus propias fuerzas del orden, ya hubo tres manifestaciones masivas. Ahora, a partir de la última marcha, se pide la renuncia de la secretaria de Seguridad Pública estatal y hasta de la propia gobernadora, al grito de: ¡Fuera Layda! Sabiendo que se venía un sentido reclamo de su población, ella prefirió dejar sus oficinas y asistir a un concierto.
La necedad de Layda de mantener a la secretaria Marcela Muñoz le pasa
factura. Se ve una gobernadora sorda a los reclamos de la población y en especial a su cuerpo de policías. Ha olvidado que los “tiempos” en política son muy importantes. En el momento electoral que el país atraviesa, su obstinada necedad no ayuda a la candidata presidencial de Morena, tampoco a los diversos candidatos a puestos de elección popular de la 4t de Campeche. Afortunadamente, esto podría hacer que el Congreso local termine siendo más balanceado en cuestión de partidos.
Lo que fue la petición de un sólo grupo de la población ha tomado fuerza gracias a la actitud de la señora. Layda decidió actuar como cacique, como lo fue su padre, priista de cuna, y quien también fue gobernador de ese estado.
López Obrador amenaza con ‘dejar sueltos a los tigres’, mientras que en Campeche el jaguar del reclamo ciudadano ya despertó y se manifiesta en contra de Morena. Los campechanos están dando ejemplo a nivel nacional. Hartos de gobernadores que, como Layda son permisivos con el crimen organizado, tiránicos hacia la clase trabajadora y que van por la vida haciendo alarde de su prepotencia. Hartos de Blanco, de García, de Monreal, de Salgado, de Sansores. Sus actuares (o falta de acción), dichos y dudosa conducción de los asuntos públicos, suman para que el voto de castigo sea contra Morena y la 4t. El ejemplo y tono de los campechanos puede cundir como reguero de pólvora. Basta que los distintas poblaciones comiencen a imitar y a escalar las protestas.
••• TRES EN RAYA: Guadalajara duele. Las madres buscadoras hallaron un crematorio clandestino donde se disolvía a las personas en ácido. Por favor: no les vuelvan a decir que sean ellas las que ofrezcan propuestas; ante su mortal hallazgo, urge empatía de los gobernantes y de quienes aspiran a serlo.