Reconocen ataque a ONG
ISRAELÍES EXIGEN LA RENUNCIA DE PREMIER BENJAMIN NETANYAHU
Israel asumió ayer la responsabilidad de un bombardeo que la víspera mató a siete trabajadores humanitarios que distribuían ayuda alimentaria en la asediada Franja de Gaza, pero aseguró que se trató de un incidente "no intencional" y prometió investigarlo.
La organización World Central Kitchen (WCK) del chef hispano-estadounidense José Andrés, para la cual trabajaban las víctimas del bombardeo, anunció la suspensión de sus acciones en el territorio palestino.
Las víctimas eran originarias "de Australia, Polonia, Reino Unido, uno con doble nacionalidad de EU y Canadá, y Palestina", detalló WCK, una de las pocas ONG aún presentes en Gaza.
"Lastimosamente ayer se produjo un trágico incidente, nuestras fuerzas golpearon de forma no intencional a inocentes en la Franja de Gaza", declaró el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu.
"Son cosas que suceden en una guerra, estamos en contacto con los gobiernos y haremos todo lo posible para que no se vuelva a producir", añadió, en referencia al ataque.
El presidente de Israel, Isaac Herzog, habló con José Andrés y "expresó su profunda tristeza y sus sinceras disculpas por la trágica muerte del equipo de WCK".
Estados Unidos, principal aliado de Israel, exigió una investigación "rápida e imparcial" sobre lo sucedido, dijo el secretario de Estado, Antony Blinken. El gobierno británico convocó al embajador israelí para expresar su "condena inequívoca" de lo ocurrido a las familias de las víctimas.
Además, miles de israelíes, entre ellos numerosos familiares de rehenes secuestrados en Gaza, volvieron a exigir en Jerusalén la renuncia de Netanyahu, a quien acusan de haber "traicionado" la confianza popular.
SON COSAS QUE SUCEDEN EN UNA GUERRA, BUSCAREMOS QUE NO SE REPITA’.
BENJAMIN NETANYAHU PREMIER DE ISRAEL