PROS Y CONTRAS

Los datos de la ENSU

Creo que vale la pena tomar, al menos con moderado optimismo, los resultados de la más reciente encuesta sobre percepción de inseguridad que publica el Inegi, que reporta una disminución en los tres municipios donde se aplica: Hermosillo (30%), Nogales (24%) y Cajeme (8%).

El caso de la capital la reducción es sostenida frente a encuestas anteriores; en Nogales es notable y para destacarse.

Nos detenemos en Cajeme, que aunque es la que menor porcentaje registra, sí hay que reconocer la tendencia y mantener la esperanza de que se mantenga en los próximos levantamientos.

No es fácil, pero tampoco imposible. Son demasiados factores los que influyen, la autoridad local poco puede hacer, la estatal un poco más, pero la federal tendría que demostrar un apoyo más decidido para sacar a Cajeme de la lista de ciudades con más alta percepción de inseguridad.

Al principio de su sexenio, el gobernador Alfonso Durazo decía que el primer reto era “aplanar la curva”, es decir, detener el crecimiento de los índices de inseguridad en el Estado y después empezar a bajarla.

Pues ya están en esa parte, la de la reducción, y aunque no es mucho hay que destacarla, porque si se veía complicado aplanar esa curva, más lo era la reducción.

Los clásicos dirían que aún falta mucho por hacer, ya lo sabemos.

Aquí mismo se los he comentado, los índices de inseguridad en el Estado, los hechos de alto impacto en zonas muy identificadas se dispararon desde la segunda mitad del sexenio de Claudia Pavlovich, de modo que cuando Durazo llega las cosas estaban ya muy descompuestas.

Y las cosas no se componen tan rápido como se descomponen.

En fin, que al menos ya se registra una tendencia a la baja y deseamos que se mantenga.

REGRESA DURAZO

El Gobernador ya anda regresando de su periplo por Davos, Suiza, desde donde estuvo enviando sus reportes, cual corresponsal internacional, con videos y todo.

Ya le entendió a eso de la reporteada. Se espera una larga y detallada conferencia de prensa para hablar del tema.

Fue lejos el mandatario al más importante foro económico del mundo a promover las bondades de Plan Sonora de Energías Sostenibles, de paso la gran oportunidad de “nearshoring” frente a las más abultadas chequeras del mundo.

Empresas e inversionistas de talla mundial que podrían llegar a Sonora a montar sus empresas y generar más empleos y mejor pagados. No suena nada mal.

Al principio, eso me consta, el propio Gobernador reconocía que no se estaba aprovechando todo el potencial del Estado frente a la relocalización de las inversiones, la vecindad con Arizona por el tema de los semiconductores, pero sobre todo la enorme oportunidad para la generación de energías limpias, no solamente a partir del litio, sino con grandes extensiones desde las cuales se puede generar energía solar, así como está sucediendo ya en Puerto Peñasco.

Ya se ha sembrado lo suficiente creo yo, para dentro de poco empezar la cosecha y empiecen a llegar más capitales relacionados con el Plan Sonora de Energía Sostenible, por ser el programa insignia de esta administración para remontar a mejores lugares en el ranking de los estados que hacen frontera con los Estados Unidos.

Es al final un tema que involucra muchos factores, que van desde la capacidad del Gobierno para atraer esas inversiones, hasta la que los empresarios locales tengan para montarse en esos proyectos con la prestación de servicios, proveedurías, etc.

Y desde luego el sector académico, que ya hace lo suyo en instituciones como el ITH, la Unison y la UES para generar desde sus aulas los perfiles de quienes pueden (y deben) ocupar los mejores cargos dentro de esas nuevas empresas.

Por cierto, se supone que nada más llegue, el Gobernador estaría anunciando algunos cambios en su gabinete, del que saldrán algunos funcionarios para convertirse en candidatos a cargos de elección popular.

Se sabe de Célida López, María Dolores del Río, Omar del Valle y José Manuel Bustamante. Pero ya lo veremos.