Marisol vence un cáncer raro en adultos
Un diagnóstico a tiempo y una buena actitud fueron la base para vencerlo y tocar la campana
Marisol Moreno Altamirano fue diagnosticada con cáncer en junio del 2022, después de varios días de sufrir dolores sospechosos de cabeza, después de dos operaciones y casi dos años de tratamiento, contenta la joven contó que ya cumplió su sueño de tocar campana y esperanzada desea tener la dicha de ver crecer a su hijo.
“En junio del 2022 me diagnosticaron”, recordó la joven de 26 años, “fui a mi pueblo para el Día del Padre, pero una semana antes que me puse muy mala, que todo lo que comía lo vomitaba, aun así lo ignoré y me fui a mi pueblo y fue cuando me puse grave.
“Ya no podía estar de pie, no podía comer, incluso abrir los ojos se me dificultaba, me desmayé en el baño y mi familia asustada me llevó a Santa Ana, pero ahí no pudieron atenderme y me llevaron a Magdalena a una clínica particular, ahí también me pusieron un suero y me dijeron que era migraña”.
Ese domingo durmió de nuevo con sus papas y al día siguiente el dolor volvió a atacarla, y su familia decidió llevarla a Hermosillo para tener la opinión de un especialista.
“El lunes en la mañana estaba otra vez gritando del dolor de cabeza, fue cuando me trajeron a Hermosillo y estuve internada toda la semana, el lunes y martes me revisaron y me operaron el miércoles; cuando desperté me explicaron que tenía un tumor y que no pudieron retirar todo, por lo que tendría que iniciar con tratamiento de quimioterapia.
“En ese momento aún no estaba en mis sentidos, vivía drogada prácticamente con el medicamento, entonces no captaba qué es lo que sucedía, fue hasta después que entendí todo, los médicos me dijeron que si quitaban todo el tumor podía tener secuelas y por eso dejaron una parte, la noticia me cayó como un balde de agua”, recordó.
Con un pequeño de sólo 4 años y el miedo a dejarlo solo, Marisol tuvo que ir a un siquiatra para recibir tratamiento que le ayudara a confrontar mejor la noticia y salir adelante de la enfermedad.
El cáncer que la atacaba no era un cáncer común, menos en una mujer adulta, por lo que gran parte de su tratamiento tuvo que ser en el sector
‘ Las primeras quimios no tenía energía para nada, me la pasaba vomitando, acostada, tirada, sí fue un proceso difícil, pero después yo misma me daba porras y me decía, ‘no puedes hacerte esto, no puedes dejarte caer, a tu niño le haces falta’, y ya me alivianaba para hacer actividades y todas esas cosas”. Marisol Moreno Altamirano 26 años de edad
privado, y solventar ese gasto era muy difícil.
“Es un cáncer de encéfalo que le da a pacientes pediátricos, pero en una persona adulta es algo muy raro y eso fue lo que más le dificultaba a los médicos.
Seis meses después de su tratamiento, en diciembre de 2022, volvió a entrar a cirugía para retirar lo que quedaba del tumor y en diciembre del año pasado le dijeron que estaba libre de cáncer.
Aun así, los médicos le recomendaron seguir tomándose su tratamiento, al menos hasta septiembre, para descartar cualquier crecimiento de células cancerígenas.
Para Marisol, esta segunda oportunidad de vida fue maravillosa, y se siente agradecida de poder ver crecer a su hijo y estar ahí para apoyarlo.
Convencida, dijo que el cáncer es una enfermedad que se puede vencer, si el diagnóstico es a tiempo y se mantiene una buena actitud durante los tratamientos, ya que para ella, no dejarse caer, fue la clave que la ayudó a llegar a tocar campana y sentirse libre de la enfermedad.