TORTA BAJO EL BRAZO
Después de convertirse en padre, el mexicano Jonathan Aranda buscará establecerse en Grandes Ligas con los Rays
PORT CHARLOTTE, FLORIDA.
El mexicano Jonathan Aranda tuvo un gran receso de temporada al convertirse en padre hace poco más de un mes.
La pequeña Regina Sofía trajo muchas sonrisas, pero no mucho tiempo para dormir.
Ahora viene un importante entrenamiento primaveral para el infielder de 25 años, quien reportó al Charlotte Sports Park en una interesante situación, luego de responder en las Menores, sobre todo en Triple A, en los últimos dos años.
La meta ahora es establecerse en las Mayores.
“Es complicado ser tan productivo como lo ha sido en Triple A y no tener esa carga”, dijo el presidente de Operaciones de
Beisbol Erik Neander.
“Veremos cómo se dan las cosas, pero si resultan como se espera tendrá un papel más consistente, él sabe que la oportunidad la tendrá y no tiene que estar estresado cada turno al bat”, añadió.
Otros jugadores como Josh Lowe y Luke Raley han aprovechado la oportunidad y ahora es el turno de Aranda.
“Estoy agradecido por la oportunidad, sé que puedo jugar al nivel de Grandes Ligas. Voy a estar listo para tomarla”, señaló el tijuanense.
El canje de Raley dejó espacio para turnos de zurdos que Aranda puede reclamar, pero con un grupo de infielders titulares, entre ellos el sonorense Isaac Paredes, y otros prospectos tocando la puerta, el mexicano tiene que ser versátil para estar en primera, segunda o tercera base, según sea la necesidad, y tomar rimo con el bat.
“Él puede batear. Sólo que no siempre pasa cuando lo necesito. Pero quiza esta Primavera sea cuando el pueda tomar encontrar su ritmo y pueda hacer cosas especiales con el bat”, dijo el mánager de los Rays, Kevin Cash.
Aranda se toma en serio su nuevo rol de padre e incluso lo ve como una fortaleza.
“Es algo que hizo un cambio. Ahora es más fácil porque hago todo por ella y por nuestra familia”.