¡Échele, mi Mariachi!
Expresión de identidad y orgullo nacional que se reconoce por todo el mundo, su importancia es tal que ha sido nombrado Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad
México es un país reconocido a nivel internacional por su vasta cultura, gastronomía y tradiciones, pero hay un rasgo muy característico de nuestra nación que cualquier persona alrededor del mundo identifica plenamente: la música de mariachi, ese estilo sonoro que enchina la piel de propios y extraños y que alegra los corazones de quienes lo escuchan, pero también es el fiel acompañante para vivir aquellos dolores y penas por las que solemos pasar todos.
Este domingo 21 de enero se celebra el Día Internacional del Mariachi, pues el 27 de noviembre del 2011, durante la sexta reunión del Comité Intergubernamental para la Salvaguarda del Patrimonio Inmaterial, celebrada en Bali, Indonesia, la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencias y la Cultura (UNESCO) reconoció al mariachi y sus expresiones como Patrimonio Inmaterial de la Humanidad.
A propósito desde que en 2004, el gremio de los músicos decidió dedicar un día en especial —precisamente esta fecha— para reconocer las interpretaciones del mariachi como una expresión artística que transmite valores y fomenta el respeto hacia el patrimonio cultural.
En ese momento tan importante para los mexicanos, la UNESCO calificó la interpretación con mariachi como “una música tradicional y un elemento fundamental de la cultura mexicana, a través de la cual se transmiten valores, patrimonio, historia y diferentes lenguas indígenas”. Reconoció además las composiciones de este género, al mariachi mismo, su vestimenta y accesorios, como “ícono mundial” y un “orgullo nacional”. Y es que grandes figuras de la música como Silvestre Revueltas, Manuel M. Ponce, Blas Galindo y José Pablo Moncayo, también ayudaron a redefinir y consolidar este estilo musical con elementos orquestales dándole una amplitud monumental que es reconocida en todos los rincones del mundo desarrollándose otros géneros importantes como el ranchero, el huapango, el bolero ranchero y la balada rancheras hasta llegar a la actualidad con nuevas texturas como el mariacheño.
Origen con varias versiones
El sitio oficial del Gobierno de México refiere que en cuanto al origen de la palabra “mariachi” existen varias versiones. Por ejemplo, una se remite al vocablo francés “mariage” (matrimonio), pues se dice que durante la ocupación francesa, en Jalisco, se contrataban músicos para amenizar las bodas. Otros dicen que el mariachi se gestó en la música popular y en los artistas de la entonces Nueva Galicia, hoy Guadalajara, Jalisco. Se afirma que el son que dio origen al mariachi surgió en Cocula y a finales del siglo XIX varios grupos se dieron a conocer en esa zona, después emigraron a la Ciudad de México.
Otra versión indica que mariachi es una palabra mestiza formada por el castellano María y el coca shi, son , y se refiere a las letras (en honor a María) y música (sones) que los habitantes de Cocula crean para adorar a la Virgen de la Pila (la Inmaculada Concepción), llevada a tal territorio por Fray Miguel de Bolonia en 1528.