Los festivales, una plataforma de reivindicación
La actriz Susi Sánchez defendió ayer, en el marco de la Berlinale, la importancia de eventos como un festival de cine o una entrega de premios como plataforma de reivindicación y aseguró que el mundo de los actores “siempre ha sacado la mano por los demás”.
La actriz, que se encuentra en la capital alemana con motivo de la presentación de la película “Reinas”, de la suizo-peruana Klaudia Reynicke, tras su exitoso paso por Sundance, calificó de “necesario” e “imprescindible siempre dar una nota que sirva de reivindicación para que los políticos se replanteen las cosas”.
Agregó que hay mucha desorganización en las estructuras de gobierno, según lo que puede apreciar desde el lugar en el que está: “Es bueno que se den cuenta de que hay una serie de personas, es decir, una mayoría de personas, que no estamos de acuerdo con determinadas cosas, pero no solamente dentro de nuestro campo”, sino en otros aspectos también, como por ejemplo estar en contra de las guerras, dijo.
Siempre un paso adelante
Destacó que “el mundo de los actores, concretamente dentro de la cultura, es un mundo que siempre ha protestado por los demás, siempre ha sacado la mano por los demás, ha dado un paso adelante por problemas generales en el mundo”.
“Creo que la política y la cultura van muy unidas, a veces demasiado, en el sentido de que dependemos de las decisiones políticas”, agregó.
Sánchez, cuyo paso más reciente por la Berlinale fue en 2021 con la cinta “Cinco lobitos”, de Alauda Ruiz de Azúa, señaló que haber trabajado con “Reinas” en una película no española, en un contexto peruano, supuso “tomar contacto con compañeros de otro país, con otro tipo de ideas sobre lo que es la actuación”.
“Sin embargo, desde la actuación, curiosamente, hay un punto universal en el que todos nos encontramos”, subrayó.
Así, contar una historia, aunque no sea de su país, pero que han vivido la mayoría de los compañeros que trabajaron en “Reinas”, y participar en contar esa parte de la historia le gustó mucho, y sobre todo, la hizo sentirse “parte de la familia” en un entorno que no era el suyo, lo cual para ella era “fundamental”, señaló.
El filme transcurre en Perú en los años 90 y narra la historia de dos hermanas, “Lucía” y “Aurora”, la mayor de ellas en plena adolescencia, que están a punto de abandonar su país para siempre rumbo a Estados Unidos junto a su madre, cuando “Carlos”, un padre ausente, reaparece en sus vidas con la intención de reconectar con ellas, aunque sus hijas lo ven casi como a un extraño.