Elimina las várices y luce unas piernas espectaculares
La insuficiencia venosa es uno de los problemas de salud más frecuentes; conoce cómo combatirlas
La insuficiencia venosa, mejor conocida como várices, es uno de los problemas estéticos y de salud a los que nos enfrentamos cuando hay un aumento de presión dentro de las venas. Las causas pueden ser de cualquier origen: vida sedentaria, embarazo, aumento de peso, falta de ejercicio físico, entre otras. La herencia genética también influye ante la probabilidad de presentar esta hinchazón en las venas.
Las várices a menudo presentan un tono morado o azulado debido a la acumulación de sangre en estos conductos. Los especialistas explican que las venas tienen válvulas que regulan el flujo sanguíneo hacia el corazón, y cuando estas válvulas se debilitan o dañan, la sangre se acumula en las venas.
El ejercicio físico y la buena nutrición pueden evitar la aparición de várices. Los alimentos ricos en ciertas vitaminas acompañan el tratamiento médico tanto para retrasar su aparición o tratar el problema. Esto, a la par de métodos como las compresas, los vendajes y terapias constantes. Como primer paso, te contamos qué vitaminas consumir para evitar las venas varicosas y en qué alimentos encontrarlas.
Vitamina C: Conocida por ser ideal para el fortalecimiento del sistema inmunológico, la vitamina C también evita la formación de coágulos y hacer más resistentes las arterias y los capilares sanguíneos, los cuales conectan arterias y venas pequeñas. La puedes encontrar en mandarinas, naranjas, limones, pimiento rojo y kiwi.
Niacina o vitamina B3: Las várices son el reflejo de la falta de circulación sanguínea. La vitamina B3 fortalece los vasos sanguíneos y contribuye positivamente en el flujo de sangre. La puedes encontrar en el pollo, lentejas, cacahuates, huevos y atún.
Vitamina E: La vitamina E ayuda a dilatar o ensanchar los vasos sanguíneos, lo que contribuye a una mejor circulación ideal para evitar las várices. Puedes encontrar esta vitamina en frutos secos como almendras o nueces y en tomates.
Vitamina K: Esta es una de las vitaminas más importantes pues permite la oxigenación en las venas, arterias y el resto de órganos. Permite la correcta asimilación de proteínas y la coagulación de la sangre, evitando hemorragias internas. Debido a sus capacidades, debe comerse con moderación y, de preferencia con acompañamiento nutriológico. Puedes encontrarla en espinacas, lechuga, espárragos, brócoli, col, aceite de oliva, entre otros.
Aunado a las vitaminas antes señaladas, el ajo es considerado un superalimento beneficioso para la circulación sanguínea, pues contiene compuestos como la alicina y el ajoeno, que mejoran el flujo sanguíneo, previenen la inflamación de los vasos sanguíneos y la formación de coágulos.
Además, el ajo tiene propiedades antiinflamatorias que ayudan a reducir la hinchazón y molestias causadas por las várices. Por otro lado, al ser rico en quercetina, fortalece las venas y los vasos sanguíneos, protegiendo así la arteria aorta y promoviendo una distribución adecuada de la sangre por todo el cuerpo.
Cabe señalar que si las várices son dolorosas o no te gusta su apariencia, tu médico puede recomendarte procedimientos para extirparlas. Recuerda que es totalmente necesario que sea el especialista el que te indique el tratamiento adecuado para ti.
Con información de El Universal